Estimados Orejas:

Soy un universitario que estuvo 4 años en un colegio de la obra en Jaen, gracias a ellos consegui acercarme a Dios, 5 años despues en un colegio mayor de Granada, tambien de la obra, he ido tomando contacto con diferentes congregaciones (redentoristas y salesianos). A partir de ahí me he dado cuenta de cómo verdaderamente estuve manipulado y en parte "secuestrado" por las ideas del opus dei, lo que me produjo a veces asombro y otras, pánico.

Le agradezco al opus que me hayan acercado a Dios, y me sentía orgulloso de mi supuesto espíritu crítico para saber distinguir desde el primer momento las cosas buenas y malas, que tambien tenia el opus, gracias a ello y a personas independientes de la obra supe neutralizar una supuesta llamada de Dios en el UNIV del año anterior sin ningun tipo de daño y continúo felizmente en un colegio mayor de la obra. Dando, como siempre, una de cal y otra de arena.

Pensaba que nunca me habían logrado "comer la cabeza" hasta que el pasado año empece a frecuentar reuniones de jóvenes cristianos a cargo de otras congregaciones, fue a partir de ahí cuando me dí cuenta de que tenía la cabeza "cuadriculada" como ellos.

Mi gran choque llegó una vez que me confesé con un sacerdote ajeno a la obra, me conocía bien ya que asistía a las actividades que programaba en su parroquia. Le dije con sinceridad todos mis pecados, casi todos ellos capitales, con numero y todo, como piden los del opus, y al acabar fue grande mi sorpresa cuando me dijo que no veía pecado alguno en mi confesion, sino pequeños errores que cada uno comete de vez en cuando y que hacemos a veces casi sin pensar y sin tener verdaderamente culpa. Fue tal el choque entre el sentimiento de culpabilidad que sentía en las confesiones del opus con la sensación de cariño, piedad y confianza que me demostraba aquel sacerdote que derrumbaron todos los esquemas que tenía sobre el pecado, sobre lo bueno y lo malo.

Me di cuenta de que el Opus lo que hizo todo este tiempo fue darme un camino a seguir, no a mi felicidad exactamente, sino a la ignorancia, inmovilidad y por consiguiente a la obediencia.

Hoy día, despues de un largo proceso de saneamiento del daño oculto que me habían hecho me he dado cuenta de que la prueba de que cada persona es libre es que cada uno tiene una escala de valores distinta, pero igual de buena, y que cada uno puede hacer lo mejor para los demás a su manera y que no se puede lograr la sincronización perfecta de muchas mentes sin que hayan fallos dentro de esa estructura, porque al final lo que se hace es que un solo pensamiento se antepone a los demas, dando lugar a un fanatismo que erosiona la vida de cualquiera.

"Dos cabezas piensan más que una", es una lastima que en un grupo tan grande como el Opus piense una sola cabeza, con tal despilfarro de bien, ¿como se va a ahogar tanto mal?.

Un saludo.

ChicoAttendis