Yo soy nuevo en este portal o como se le llama a esta organización. Estaba buscando peluquerías en Google y me encontre con esto.

Quiero que sepan que me tome la molestia, y digo la molestia, porque en verdad, me es molesto estar sentado en la computadora, pero por alguna razón estoy aquí escribiendo.

Estuve leyendo algunos escritos que tienen y de lo que se trata el sitio. La verdad, me pareció un poco atrevido, porque hablar mal de una Obra de Dios, estoy de acuerdo que como en todas partes habemos humanos con errores, lo mismo pasa en la Iglesia. Pero Dios nunca se equivoca, como es posible que un hombre de un pueblito de España haya hecho todo esto??, No se dan cuenta de la mano de Dios en esas obras?? Conozco la obra, no soy simpatizante y nunca me intentaron lavar el cerebro con que tenía vocación, la vocación no se infunde ni se graba en la mente de las personas, la vocación es un regalo de Dios para los hombres. Así que, si ustedes hombres que se juntan para quejarse de lo malo que los trataron o de algún rencor o coraje que tengan con una obra que busca la salvación de las almas, no pudieron seguir, es simplemente por que no tenían vocación para ser miembros del Opus Dei, punto. Dejense de andar llorando y busquén con la ayuda de Dios el porqué están en este mundo. Si no pudieron seguir en la obra pues, busquen donde deben estar para que los quiere Dios en este mundo.

Claro está, que es mas fácil destruir, que crear.  Todos estamos destinados a cargar con una cruz en este mundo, como lo hizo Jesucristo, o la abrazamos con amor, o la tiramos para no esforzarnos.

Este sitio no es mas que un vil ejemplo del trabajo del demonio para confundir las cabecitas de los humanos.

Gracias espero lo publiquen.

Mi nombre es Walter Gerhard.

(Nota de Pablo. Es increíble -y de agradecer- que hasta buscando "peluquerías" en Google, aparezca esta web. Además de web "porno", de "violencia" y "sectas", ¿nos han incluído en la sección "peluquerías"?. Se me olvidaba que lo normal es entrar en Google para buscar una peluquería a la vuelta de la esquina. Y, qué mala suerte, aparece opuslibros, los peluqueros de toda la vida, especialistas en "Opus Dei: ¿Un camino a ninguna parte?". Y aún así insiste Walter porque a pesar del título de la página "Gracias a Dios, ¡nos fuimos!", algo le dice que aquí encontrará peluqueros. Todo tiene una lógica aplastante. Para no alargarme, sigo las indicaciones de Emejota y remito a pelos largos Walter Gerhard al Rincón de internauta casual. Pablo).