Todos cometemos errores. Para Amapola.- Nieves
Fecha Friday, 20 May 2005
Tema 040. Después de marcharse


Mi querida Amapola:

hoy despues de leer tu mensaje, lo primero que he hecho ha sido leer lo que me faltaba de tu libro. Creo que con todo lo vivido cada una no dejamos de impresionarnos y meternos en pieles ajenas sin querer, como si fueran nuestras.

Me dices en tu mensaje, que lo cuentas por primera vez por cierto, que al salir cometistes un error irreparable. Pues bien tengo que decirte algo porque así lo siento: los errores no se reparan; se analizan con la cabeza fria, o con el corazon roto; se aparcan; se te clavan en el alma y ronronean sin parar; pero al final hay que ponerlos en su sitio, y antes que pedir perdon - si fuera el caso- a alguien,  hay que perdonarse a uno mismo. Luego se pueden curar heridas cuando se lavan primero, aunque pique.  Entonces estamos listos. Podríamos hacer una página web también de errores cometidos. Estaria al completo, no lo dudo.  ¿Y sabes lo bueno de que hayas dicho esto en tu mensaje? Que una se ve más cercano a los demas. ¿Has visto a un crío en el suelo?, ¿a un perro atropellado?, ¿a un padre llorando la muerte injusta, por su temprana edad de su hijo? ¿a un hijo llorando la muerte de su madre, sin haber podido decirle.... tantas cosas? Cuando alguna situacion infame nos toca de lleno tendemos a preguntarnos: ¿qué hice mal?. Creo que a todos los que hemos conocido esta página se nos ha dado un regalo: el de no querer vivir solos en el corazón.  Por eso nos contestamos, intentamos ayudar; por eso Amapola ¿que importa tu error? Lo unico que importa es que a ti no te arrastre al dolor; yo desde que conocí esta web, he emprendido una batalla de cariño, porque es lo que me he negado durante muchos años aun despues de salir de la obra, ¿sabes?. No me resulta fácil, pero aquí estoy, hoy escribiéndote a ti; mañana quizas llorando, al leer un correo; cada día conociendo todo lo bueno que no conocía y - ¿por qué no decirlo? - asumiendo lo malo como algo que es pasajero. Lo que durante años se nos enseñó - que no había amistades particulares, que los sentimientos no eran puros ni buenos - en la obra, ahora es una cruzada. No quiero morirme con tanto que llevo dentro. Y aunque no se pueda mandar un abrazo por esta página, cuando pienses en eso tan irreparable, cierra los ojos y siente mi abrazo, lleno de cariño.

Nieves

P.D: ¿te acuerdas de aquellas numerarias auxiliares mayores, con esa cara amargada, tristona? Pues no dejemos que caigan más losas. Yo lo intento, y tú por estar ahí, tengo que decir que tambien contamos contigo. Si puedo ayudar aquí estoy.









Este artículo proviene de Opuslibros
http://www.opuslibros.org/nuevaweb

La dirección de esta noticia es:
http://www.opuslibros.org/nuevaweb/modules.php?name=News&file=article&sid=4907