Mis felicitaciones a Miguel Ángel.- Carmen Charo
Fecha Monday, 14 February 2005
Tema 100. Aspectos sociológicos


Querido Miguel Angel, mis felicitaciones a ti y a tu mujer por vuestros dos tesoros y por la sencillez con la que nos haces participe de tu problema.
 
Yo, que no soy doctora en nada y menos en Moral, te diría que dirijais vuestra vida personal y de pareja según vuestra conciencia, tomando las decisiones que en cada momento os parezcan más oportunas, sin sentiros atados a ningún código moral de conducta. Lo dice maravillosamente Flavia en su carta del día 9, y te lo copio:
 
"...acerca de ciertos temas morales del catolicismo, supongo que hay un aspecto muy importante a analizar, aquel de los aprendizajes forjados en el Opus Dei, en los cuales no hay lugar para la conciencia personal, por mucha ortodoxia que se invoque como excusa, por lo tanto, no hay moral, en sentido propio, en la medida en que la moral supone libertad, y la libertad se da en un contexto de discernimiento. Me refiero al aspecto medular de la decisión ética, que distingue al formalismo moral, de la moral cristiana. No creo inútil recordar que existe una acendrada tendencia en la formación adquirida en la Obra, a bloquear todo discernimiento, y a aplicar recetas y clasificaciones sin más. Ese "formalismo moral", en muchos casos, ha implicado e implica un nivel de inhumanidad y cerrilidad que espantan, a la hora de pautar la vida de las personas concretas."
 
- en ese sentido, no creo que uno pueda obviar, en lo concerniente a los planteos morales en la Iglesia, el horizonte de fondo en el que se configuran: la antropología cristiana, por la cual el ser humano no puede ser objeto de manipulaciones, tampoco de las que surgen del legalismo vacío y autosuficiente. En modo alguno esto implica huir de la responsabilidad personal, o justificar cualquier conducta, muy por el contrario, plantea asumir la madurez en la fe, y tomar la tarea de que la ley tenga "espíritu": corazones de carne, no de piedra, quiere el Señor, nos recuerda (penitencialmente) el rey David en el salmo 50.
 
- si hay algo que me ha causado pavor de mis años en la Obra, y de la reflexión acerca de esa etapa, es la imposibilidad de distinguir, de discernir, de hacerse cargo de los propios pensamientos y decisiones que allí se forja. Es claro que esa imposibilidad se conforma en un largo proceso de borramiento personal, y, aún en los mejores casos, deja siempre la huella de la negación de la realidad, o de la despreocupación ante la complejidad de las situaciones vitales propias y de otros "...
 
A mi eso es lo que me produce escalofríos al leer a algunos en esta página, que se han quedado en un formalismo moral, cumplidor y lleno de miedo. El Señor quiere corazones de carne y no de piedra.
 
¡Mucho ánimo, y que seais muy felices!
Un fuerte abrazo
 
Carmen Charo








Este artículo proviene de Opuslibros
http://www.opuslibros.org/nuevaweb

La dirección de esta noticia es:
http://www.opuslibros.org/nuevaweb/modules.php?name=News&file=article&sid=4120