Me estoy volviendo a encontrar con Dios.- Carmen Charo
Fecha Monday, 07 February 2005
Tema 040. Después de marcharse


Para "el Idiota", con toda mi admiración, respeto y cariño:
 
Si señor, estoy contigo. "Soñad y os quedareis cortos" no te volverás corto (tontito), como tu dices, sino que te quedarás corto, que hay mucho más de lo que imaginas. En la obra nos han mentido tanto, han abusado de nosotros tanto, que por mucho que imaginemos, no sé si llegaremos a saber nunca qué hay debajo realmente.
 
Yo salí pensando que era yo la mala y la inadaptada. Han pasado 15 años y veo meridianamente claro que la organización no tiene resquicio de bondad. Creo que lo que mejor la define es llamarla perversa. El Dicc. Real Academia Española la define como "sumamente mala, que causa daño intencionadamente" "que vacía con malas doctrinas o ejemplos las costumbres, la fe, el gusto..." Eso ha hecho la obra, por lo menos conmigo, asi que soy de las que llevan encima quemaduras muy graves.
 
Yo, como tu, soy de las que no quieren resignarse a pensar que no tiene vocación. Quiero decir con esto que yo pité con todas las de la ley, que fui plenamente consciente, a pesar de mis quince años, de que tomaba una decisón vital, de compromiso para vivir un servicio de amor a todos los hombres y mujeres. Así viví mis 17 años dentro y hoy mantengo esa misma ilusión por esa decisión de vida. Hoy puedo decir con toda propiedad, si no me diera alergia la palabra por su mal uso, que soy Opus Dei.
 
También es cierto que hoy pienso que no hace falta alistarse a ningún grupo u organización para ello. Que la vocación es universal, es un estilo de vida que nace de lo más hondo del ser, es un don, una necesidad. Es bueno rodearse de gente afin, que a una le ayude, que le den ánimo, gente con la que poder compartir esa ilusión...
 
He dicho en otros escritosa que no soy "creyente", y lo pongo entre comillas porque por esa palabra todos entendemos la persona que va a misa los domingos, cumple los mandamientos, cree los dogmas, obedece al Papa... el típico practicante. Yo me quedo con el primer mandamiento de la ley de Dios y todo lo demás lo dejo a la libre decisión de mi conciencia en cada momento. Ya no obedezco a nada porque sí, porque lo contrario es pecado. ¡No tengo miedo!
 
Pero me estoy volviendo a encontrar con Dios. Igual que tú dices, yo no he renunciado a ser hija de Dios, amada de Dios..  Yo, y muchas personas en esta web, hemos dejado de practicar, algunos dicen que se han vuelto ateos... pero no creo que sea para tanto. Yo me alejé de dios, y lo pongo en minúscula.
 
¿Sabes lo que pasa? Que el dios de la obra es una caricatura. Ahora estoy comenzando a conocer a DIOS. ¡Què aberración!, ¿verdad? Uno pierde la fe en el mismo momento en que es fidelísimo a la obra. Uno se rompe, se destroza humanamente, interiormente, como nos contaba ayer Jacinto Choza, y se le cae todo el teatro espiritual que se había montado dejando la vida por la obra.
 
Y,  ¿ahora qué? Ahora tienes que empezar a ser tu mismo, a prescindir de seguridades y cielos prometidos. Por supuesto que la experiencia de la obra te marca y ya no puedes ser tampoco el que eras antes de entrar. Como le decía el otro día a otra oreja, quizá la obra para lo único que nos ha servido es para ser conscientes, hacer patentes la inmensidad de cualidades y talentos que teníamos y tenemos: la capacidad de dar desinteresadamente,  el entusiasmo a raudales, la capacidad de sacrificio, la alegría, la honestidad, la humildad... y tantas cosas más.
 
¡Animo y a Vivir!
 
Carmen Charo








Este artículo proviene de Opuslibros
http://www.opuslibros.org/nuevaweb

La dirección de esta noticia es:
http://www.opuslibros.org/nuevaweb/modules.php?name=News&file=article&sid=4048