En los últimos envíos de José Carlos, se está produciendo algo que me inquieta. Está haciendo strip-tease interior para justificar(se), justificarnos su vida.
Antes jugaba en otro campo, el caballero sin miedo y sin tacha que defendía la Cosa como podía y veía valores y posibilidades donde los demás encontrabamos puntos oscuros. Desde luego no defendía cosas concretas, usaba el argumento de que él había sido testigo de situaciones que contradecían la versión comun en la red. Se negaba a percibir las sombras, digamos que las rehuía y trataba de usar el argumento de la superabundancia de bien para compensar los defectos que se apuntaban.
Desde luego esta página no era el campo mas propicio y ahi andaba el hombre entre los limites de la indignación de los mas y la paciencia de los Orejas, pero siempre era entretenido leerlo, era como el pepito grillo que nos recordaba, que en la vida hay de todo y que ser mas, no necesariamente quiere decir que tengamos razón. Luego seguías leyendo y José Carlos se iba a su sitio, una persona comprometida por voluntad propia en una lucha desigual por volver a vendernos la burra, a los que ya la habíamos comprado y conocido a fondo.
En los últimos tiempos algo ha cambiado, ahora parece que la Cosa ocupa un segundo plano, en su deseo de entender la voluntad de Dios en su vida, siguiendo los vericuetos de su experiencia personal. Nos pone por delante trozos escogidos de su biografía, todavía serios candidatos de las vidas de Santos, y lucha bravamente como siempre, en explicarnos como Dios le fué llevando hasta donde ahora está.
Dany se queja de que nos metemos con él, pero Dani, Jose Carlos salvando las distancias está haciendo de protagonista de la prensa del corazón, él elige lo que escribe y lo pone a la mirada publica y esto no es una sociedad de Bombos mutuos, si nos explica su vida nos podremos meter con su vida, si nos explica sus ideas, será sobre eso con lo que haremos comentarios.
Mi opinión es que José Carlos todavía no se ha dado cuenta que está fuera de la Cosa y sigue buscando fuera sistemas, esquemas y trucos propios de estar dentro. Le imagino buscando una "rosa" de Rialp cada día.
José Carlos, hombre. ¡Déjalo ya! Estás fuera. La voluntad de Dios no se revela continuamente en pequeños detalles diarios. Es mucha arrogancia pensar y necesitar apoyos concretos y regulares que te marquen el camino. Imaginate el día que pises una caca de perro. Por eso no se hunde el mundo. Además la "rosa" de Rialp era una piña, o sea que el milagro estuvo en la cabeza del artista, nada más lógico que encontrar una piña en un pinar.
Tú lo viste claro o eso te pareció; tomaste lo que consideraste la dirección correcta y ya está. A partir de ahora las reglas de juego son otras. Ya no eres un hijo "escogido " de Dios en su "Opus dei", solamente eres una persona por la que el Hijo de Dios decidió dar su vida y maldita la falta que te hacen otras ayuditas. No hay que justificar nada, tu hiciste lo que pensabas debías hacer y eso lo justifica todo. Dios es bueno y si acertaste, estupendo y si no, pues también. ¿O te crees todavía que el Marqués va a influir en como va a considerar Dios una decisión tomada de buena fe? Montate tu vida con tu mujer y deja de mirar atrás.
Además yo siempre pienso que la última jugada que nos queda a todos, es la del hijo pródigo, y de esa tambien conocemos el final de la historia y de quien hay que oirla, sin intermediarios.
Para Ana Isabel Moscoso. Como verás justificar, justificar, no es una cosa que hagamos todos. No suele bastar con vivir nuestra vida. Eso si, nos gusta ayudar a los que han quedado malparados por la experiencia de la Cosa, y que como puedes ver somos unos pocos y a los que vosotros dedicais tan poco interés.
Con cariño
Cooper
