Lo más humillante.- RRR
Fecha Monday, 06 December 2004
Tema 010. Testimonios


Lo más humillante


Aunque por muchos, demasiados, años perteneci al Opus Dei quiero dejar testimonio de lo que me pasó cuando aproximadamente tenía 27 años.

Yo vivía feliz en una casa de la Obra hasta que cambiaron a la directora y llegó quien no tenía sino un hambre de poder y de adueñarse de las personas como no he visto a nadie. Resulta que este personaje se empeñó en que fuera al médico (porque era muy callada y no me gustaba hablar en las tertulias. Sin embargo yo antes de que llegara ella, era evaluada dentro de las mejores profesoras en la obra corporativa donde daba clases y en mi juventud tenía varios premios de oratoria. Cuando llegó ella yo dejé de hablar en las tertulias y comidas, -porque si decía algo que no era del agrado de esa directora a la mañana siguiente me caía una corrección fraterna de alguna de su club de admiradoras: cualquiera de las vocaciones recientes- así que no tuvo a mejor que llevarme con un neurólogo... quien me dijo que tenia un problema hormonal por lo que no podria tener hijos jamás, a menos que me operaran... (siendo numeraria eso no fue problema), sin embargo me recetaron unos medicamentos que me hacían perder control de cuándo debería ir al baño. Así que ya se imaginarán ustedes la vergüenza cuando dando clases en el colegio de repente dejaba charcos o sillas mojadas... Era de lo mas humillante, al grado que perdía gradualmente mi autoestima... me rebelaba y dejaba de tomar las medicinas, pero entonces me venían por efecto del medicamento en su ausencia, un auténtico sentimiento de culpa como si hubiera matado a cinco.

Pedí muchas veces que me cambiaran de centro y de trabajo, pero simplemente se limitaban a decirme que lo ofreciera y que lo que pasaba era falta de visión sobrenatural, que se lo dijera al medico y ... a pesar de ello los charcos continuaban... Finalmente me pidieron la dispensa de vida de familia, pero mis padres no lo comprendían porque para ellos yo ya me había ido y con lo que ganaba en esa escuela no podría mantenerme sola y estaba tan deprimida que no podía vivir sola, así que me asignaron a otra casa, donde repentinamente me curé, ... me hicieron ver que fue milagro del ahora San Josemaria...

Efectivamente dejado ese neurólogo y en otro ambiente y trabajo me desempeñé tan bien que al poco tiempo encontré la fuerza para irme. (Yo por la penosa anécdota prefiero no pongan mis iniciales verdaderas).

RRR







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