El opus Dei en el Vaticano.- Galileo
Fecha Wednesday, 01 December 2004
Tema 125. Iglesia y Opus Dei


El opus Dei en el Vaticano

No conozco los intríngulis de la curia Vaticana, pero sí puedo comentar algunas cosas que vi, oí o viví en el opus. Dionisio (29/11) nos habla de la apetencia del opus Dei por el poder y recientemente estaba pensando en qué es lo que realmente motiva a la docena de personas que de verdad mandan en el opus, es decir al entorno del prelado en Roma (todos varones y curas) y quizá el vicario de España. Todos los demás en el opus son subalternos y no deciden las líneas maestras de la institución.

Si algo ha caracterizado la acción del opus Dei en los últimos 25 años es una gran actividad por ocupar puestos y conseguir influencia en el Vaticano, es decir en ser importantes. Eso ha sido tan notorio que da la impresión de que las labores, el comienzo en ciertos países, son maniobras para impresionar y dar una imagen de pujanza y prosperidad en una iglesia plagada de instituciones en regresión.

También ha procurado el opus camuflar sus peculiaridades litúrgicas, pero sólo de puertas afuera. Cuando se llevaron a cabo esos cambios, no se nos justificaron, ni por supuesto se reconoció que se mejoraba algo. La única razón siempre ha sido que "convenía", pero que yo sepa jamás el opus ha reconocido que lo que se hace ahora es mejor que lo que se hacía antes.

Si un día -pronto no tendrán más remedio- les toca poner un colchón a las numerarias, no reconocerán para nada que la tabla era una barbaridad, que eso fastidia muchísimo, impide descansar correctamente, estropea la espalda, y creo que no hace mejores a las personas. Si aceptaron los pantalones fue porque no les quedó más remedio, hoy en día pocas chicas normales de 16 años están dispuestas a dar el cante llevando siempre faldas por debajo de las rodillas. Esa digresión viene a cuento de que los cambios no se reconocen como mejoría (eso no cabe en algo que ya es perfecto según ellos) sino como conveniencia, y que suelen deberse a intereses institucionales (quedar bien ante la Iglesia, que pite más gente…) y no a un verdadero interés por las personas singulares y por su amejoramiento.

Siguiendo con el tema del Vaticano, el opus Dei planteó una estrategia muy agresiva desde que llegó Juan Pablo II al pontificado. Creo que básicamente se orientó en tres direcciones: imagen general del opus, ganarse uno a uno a los prelados de la curia y la canonización de Escrivá.

Los medios ingentes, el gasto en dinero y tiempo, que suponían las visitas del Papa -tuve que preparar una- llamaban mucho la atención, así como los encuentros del UNIV, ciertas labores sociales… todo eso se podría encuadrar en la imagen del opus.

En Roma se creó un equipo de personas, fundamentalmente curas, destinados a "tratar" a los prelados de la curia. Por "tratar" obviamente no me refiero a hacer apostolado con ellos, sino en ganárselos para la causa e impresionarlos. Recuerdo haber oído comentar que esos prelados a veces están bastante solos y entonces se les acompañaba al médico y se les pagaba la factura, se organizaban excursiones con ellos, se les ayudaba, en fin se les hacía la pelota descaradamente, y por supuesto se iban recabando datos en fichas como comenta Nacho, de modo que el opus sabe perfectamente con quién puede contar en el Vaticano.

De la canonización se ha hablado mucho. Con ese fin también se organizó un equipo de curas en Roma destinado a trabajar en la causa. Por lo que me comentaron eran muchos y en dedicación exclusiva y estaban obligados a guardar estricto secreto de lo que hacían.

Los resultados de esa estrategia son los que todos conocemos. El opus ha concentrado enormes esfuerzos y medios en algo totalmente ajeno a la santificación en la vida ordinaria, y dudo mucho de la santidad o ética de los medios empleados para conseguir esos fines. Han dado una imagen que no es real, porque sabemos que están pasando por una gran crisis de vocaciones y de "perseverancia". Si no aceptan que pueden y deben mejorar muchas cosas no les va a ir nada bien, porque no existe ninguna institución duradera que no haya cambiado cosas importantes, empezando por la Iglesia Católica, que ha reconocido errores y dispone de medios -como los concilios- para reformarse.

Un abrazo a todos,

Galileo









Este artículo proviene de Opuslibros
http://www.opuslibros.org/nuevaweb

La dirección de esta noticia es:
http://www.opuslibros.org/nuevaweb/modules.php?name=News&file=article&sid=3549