¿Cuándo exactamente se nos desvió Chema?:

A) Cuando decidió fundar la Sección Femenina y propiciar la esclavitud de nuestras hermanas numerarias auxiliares. (Su abuela y hermana le hubieran ayudado a no meterse sin la empatía mínima en labores femeninas de muy alta exigencia; los numerarios hubiéramos podido prescindir de los servicios privilegiados en el hogar y resolver autónomamente los quehaceres domésticos; ellas podían prescindir de confesiones en casa y dirección espiritual y todo tipo de injerencias en sus asuntos; quedaría tan solo el crédito al Chema y la semilla de sus escritos y otros buenos ejemplo de teorías y praxis abiertos a toda la Iglesia y cristianos, ortodoxos y heterodoxos.)

B) Cuando decidió entrometerse en la vida interior de cada elemento del conjunto, mezclando la confesión y dirección espiritual y charla íntima sobrepasando la dignidad de hermanas y hermanos.

C) Cuando valoró más -o al menos descuidó la santa pobreza- el dinero, lo pecuniario, la comodidad financiera institucional y personal, ante las adversidades materiales, los infortunios monetarios tangibles, y en contra del sentido auténtico de la virtud de la pobreza, aspiración humana tan ingenua como la castidad, pero sobre las que no hay que cejar y redoblar los esfuerzos de por vida.

D) Cuando se destierra el amor, la solidaridad, la amistad, la fraternidad entre los elementos en aras de objetivos menores.

E) Cuando se les da la espalda a quienes deciden no perseverar. (E incluso ¡se les agrede! y se les amenaza con penalidades infernales, infundadas, malintencionadas, calumniosas, perversas.)

Bien haya a quienes “hicimos lo que debíamos” saliendo de la corriente opusdeísta. No importa cómo o por qué salimos. ¡Gracias a Dios!, esgrime OpusLibros. Cada una y cada uno asumamos nuestra salida. Y sigamos en el intento de hacer lo que debemos, con una visión mejor: ¡divinamente humana!

Irdlm