Sigo con más o menos asiduidad esta página. A veces simplemente la ojeo y otras devoro vuestros escritos.
Hoy leí a Maripaz y volví a emocionarme con su historia. Que mujer tan valiente. Gracias también a Junio por sus aclaraciones y por abrirnos los ojos. Sé que ella nunca fue una numeraria al uso y que siempre luchó contra las indiscreciones y la falta de caridad de la institución. Lo pagó con su salud igual que Maripaz. Hoy me consta que son mujeres felices, equilibradas y optimistas.
Un fuerte abrazo.
Mariki