Los derechos de las mujeres en el Opus Dei.- Aloevera
Fecha Monday, 01 June 2015
Tema 077. Numerarias auxiliares


Publicado en Religión Digital 30/05/2015

Los derechos de las mujeres en el Opus Dei

Antonio Esquivias – 30/05/2015

Me animo a escribir estas letras después de leer a Mariano Fazio, Vicario General del Opus Dei, que afirma en una entrevista en El País que: «hay una total igualdad entre varones y mujeres en lo que respecta a sus roles sociales, también dentro de la Obra»...



Bueno, como todo el mundo sabe los hombres pueden pertenecer al Opus como numerarios, supernumerarios y agregados, teniendo cada una de estas categorías un rol institucional y por tanto también social diverso. Las mujeres además de las tres categorías mencionadas pueden pertenecer también como numerarias auxiliares. ¿Qué papel desempeñan estas numerarias auxiliares dentro de la organización? Muy sencillo, desempeñan todas las denominadas “tareas domésticas” de los centros, tanto de los numerarios, como de las numerarias. Es decir, lavan la ropa, limpian los suelos, planchan, hacen la comida,… precisamente por esta labor se denominan “auxiliares”.

Además si alguien pide la admisión como numeraria auxiliar esa va a ser su función toda su vida. No va a haber progreso, no va a haber subida, nunca va a ser numeraria a secas. Es decir siempre va a estar bajo las órdenes de una numeraria, a la que se la llama Administradora, que es quien organiza y decide las tareas domésticas de un centro o residencia para que esta funcione.

Todo eso va acompañado de fuertes distinciones en la vida cotidiana, como la utilización de trato de respeto, como el uso del usted para dirigirse a la administradora, la separación en zonas diversas para vivir, incluso en comedores diversos. Elementos todos procedentes de una concepción del “servicio” y de las “sirvientas”, que procede de los usos de la burguesía española de los años 40 y que ha recibido algunos cambios, dado que su desacuerdo con las costumbres actuales es demasiado estridente.

Ni siquiera hombres y mujeres son iguales en cuanto a las mortificaciones prescritas ya que las mujeres, todas las numerarias y auxiliares deben dormir en tabla (no en colchón). Esta obligación no vige para los hombres.

Siguiendo con las diferencias, las mujeres no pueden ser elegidas para gobernar el Opus Dei, puesto que se trata de un Prelado de la Iglesia Católica, pero esto no elimina la diferencia: ellos sí, ellas no. Además en el Opus Dei tampoco pueden elegir siendo el voto de las mujeres para la elección del Prelado meramente consultivo y no deliberativo, es decir ofrecen un consejo que puede ser desoído por los electores hombres.

Todas las circunscripciones de las mujeres tienen un hombre a la cabeza, un vicario nombrado por el Prelado. También en cada centro de mujeres hay un hombre: el sacerdote del centro. En todos estos aspectos no ocurre lo mismo para los hombres, que no tienen ninguna mujer en sus equipos directivos.

Luego afirmar como ha hecho Mariano Fazio que «hay una total igualdad entre varones y mujeres en lo que respecta a sus roles sociales, también dentro de la Obra», es claramente inexacto

 

Publicado en Religión Digital 1/06/2015

La situación laboral de las numerarias auxiliares en el Opus Dei

Antonio Esquivias, 1/06015

Sigo con el comentario a Mariano Fazio, Vicario General del Opus Dei, que afirma en una entrevista en El País que: «hay una total igualdad entre varones y mujeres en lo que respecta a sus roles sociales, también dentro de la Obra».

Primero hay que tener en cuenta que, a pesar de pertenecer a una organización de la Iglesia, su situación legal es exactamente igual a la de cualquier otra trabajadora, porque ese es el carisma que dice poseer el Opus Dei con frases lapidarias como: no nos distingue de cualquier otra persona “ni siquiera un papel de fumar”. Además en el mismo inicio de los estatutos (n.4) se establece que el ejercicio de un trabajo es condición para pertenecer a la Prelatura: «Los fieles del Opus Dei… se esfuerzan por cumplir con la máxima fidelidad las obligaciones del propio estado y la actividad o profesión propia de cada uno, siempre con el máximo respeto por las leyes legítimas de la sociedad civil». Luego no hay distinción jurídica alguna con los demás ciudadanos.

Teniendo en cuenta esto vamos al caso de las numerarias auxiliares. Me consta que hay personas con contratos de 34 horas semanales trabajando 56 horas, sin respetar los días de descanso y con turnos que no son legales. Duermen muchas veces en el sitio de donde trabajan, con lo que no descansan como deberían al no salir de su trabajo, lo que a veces se prolonga por semanas enteras.

No hay retribución ni cotización alguna por las horas extraordinarias. También me constan sueldos de 700 € de los que se detrae cerca de 400 € por su manutención. Me consta por ejemplo el caso Se de una que era responsable de la cocina de un colegio mayor, con 20 años de experiencia en el trabajo hostelero y cobraba setecientos y pico euros, de los que debía pagar al centro, que era al mismo tiempo su casa y su lugar de trabajo, cerca de 400 € por su manutención.
El único punto ligeramente positivo es que, progresivamente el Opus Dei se ha visto obligado a cumplir la legislación laboral y se puede decir que actualmente las personas que trabajan en esas labores en la administración de las residencias tienen seguridad social, la más baja posible, pero la tienen, o pueden recurrir a los tribunales para obtenerla.

Aunque incluso en esto hay “trampas”: Se intenta que quienes trabajan en centro pequeños de hombres coticen en el Régimen de Empleadas del Hogar, que es más barato y con menos derechos que el Régimen General. Para eso esas residencias deberían ser casas de familia, pero no lo son, tanto por sus dimensiones como por el número de personas que viven en ellas, además de que suelen ser lugares con actividad pública.

Además las numerarias auxiliares, una vez jubiladas siguen ejerciendo trabajos de jornadas completas con la misma responsabilidad, como hasta no hace mucho la responsable de cocina de la casa de la delegación de mujeres de una ciudad española, que no es cualquier casa, y donde hay que preparar a diario la comida para por lo menos 12 personas.

También las directoras de estas administraciones de centros, se encuentran desprotegidas y no tienen seguridad social. Trabajan haciendo eso que se denomina en el Opus: trabajos internos, sin sueldo ni cotización.

Desde hace un tiempo a estas numerarias que dirigen a las numerarias auxiliares que se les ofreció en vez de cotizar a la Seguridad Social, como establece la ley, abrir un plan de pensiones, de forma que a su jubilación dispongan de algún dinero. Es lo único que estas numerarias pueden tener en caso de que decidan dejar la organización. Esto además de estar fuera de la ley, no se cumple en todos los casos y no tiene protección alguna.







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