Sin entrar en simpatías o antipatías hacia Eduardo Galeano, si me gustaría preguntarle a Pepito por qué cree que se pasa tantos pueblos cuando habla del santo Escribá. Yo creo que aun se queda corto. Su monumental mentira sigue haciendo daño en los cinco continentes, así que por lo que a mí respecta, respeto ninguno hacia este señor. Y seguimos a la espera de que el Papa Francisco se atreva a meter mano a esta organización perniciosa.

Me alegra leer a Aguaviva, con un lenguaje tan distinto del habitual por estos lares, y le agradezco que nos desempolve a las mujeres, nuestra dignidad, nuestro derecho a ser felices..., tan pisoteados en el Opus Dei, en todos los sentidos: ancilla Domini, y ancilla de cualquier hombre, siempre a su servicio en la casa, con los hijos, en la cama, en la vida social. He conocido unas cuantas que han sufrido de manos de sus devotos maridos supernumerarios esas violaciones espantosas. Y las numerarias y las auxiliares? Tontas útiles, que no pintan nada en las decisiones importantes de la prelatura, a las que solo se les pide que callen y sean discretas. Para qué repetir lo que todos ya sabemos! El Opus Dei es un mundo de hombres, no, es un mundo netamente machista, y esa impronta también se grava a fuego en muchísimos de los que han pasado por sus filas. Asi que gracias, gracias porque nos has ayudado a recordar nuestra dignidad y nuestro inmenso valor.

Carmen Charo