Opuslibros - Acerca de la nulidad del contrato con el Opus Dei.- Sergio

acerca de la nulidad del contrato con el Opus Dei

En el matrimonio, la mayoría de las causas de nulidad se refieren a vicios de consentimiento: de si realmente queríamos casarnos con esa persona o no. Esos defectos del consentimiento se dan cuando actuamos sin libertad, bien por defectos en la voluntad (por ejemplo, si actuamos por miedo) bien por defectos de la inteligencia (cuando se nos engaña acerca de la otra persona). Un caso intermedio se produciría por "falta de madurez": no nos enteramos de las cosas de las que deberíamos enterarnos, o no las valoramos suficientemente, porque somos no damos para más. Probablemente esto se da en el matrimonio de dos personas que se casan nada más conocerse, o demasiado jóvenes.

En todos esos casos es razonable plantearse si el matrimonio (un contrato) es nulo.

Un caso totalmente distinto es que con el tiempo uno u otro cambien tanto que, de volver a tener que tomar una decisión, seguro que no se casarían con esa persona. Esto, evidentemente, no es motivo de nulidad (aunque podría serlo de separación).

Pues bien: en el caso del contrato que se establece con el Opus Dei, me atrevo a asegurar que en TODOS los casos fue NULO: a nadie se le explicó la letra pequeña, es decir, los compromisos que realmente asumía al hacerse numerario o agregado. ¿Alguien leyó los Estatutos antes de pitar, o antes de hacer la Oblación, o antes de hacer la Fidelidad? ¿Y el Catecismo? ¿Y todos los Vademecums? ¿Y todas las Glosas? ¿Y todos los Criterios, Praxis, notas de Roma, etc., que iba a tener que vivir? ¿Pudo preguntar todo lo que no entendía sin que le dijesen que era de mal espíritu no fiarse de los Directores? ¿Pudo contrastar esa información fuera de la institución (con su familia o con la Iglesia)? Evidentemente, no.

Por otra parte, si uno se casa porque su novia le dice que en caso contrario se va a suicidar (que me disculpen "ellas" por ponerla como "la mala" de la película), ¿sería válido el matrimonio? Pues lo mismo si te dicen que no pitar, o no renovar, o no perseverar significa traicionar -volver a crucificar- a Jesucristo.

Los responsables de la Prelatura deben asumir que lo del "plano inclinado" no es aceptable entre adultos, y que actuar con esa falta de honradez tiene consecuencias.

Sergio.

PD: Paco Feliu: antes de hacer la Oblación, ¿leiste los estatutos en latín o en español?