Recuerdo el consejo que daba a supernumerarios jóvenes y en la destrozada vida de un familiar cercano que, perdidamente enamorados de una chica, llega noticia proveniente del sacerdote que les confiesa o a través de la charla fraterna, que dejen ese noviazgo; ya sea porque la chica no sea virgen, haya tenido un compromiso previo, haya cometido un aborto o no tenga futuro para ser de la Obra. En verdad, les arruinan las vidas y acaban casándose con supernumeraria que no aman y… para qué les cuento cómo prosigue la historia ¡Por favor, si aman a alguien y les dan tal consejo, no hagan caso!
Recientemente lo vi en un supernumerario al que le aconsejaron dejara su novia y buscase supernumeraria. Ambos viven como separados y, en las ocasiones que lo veo con la que debería haber sido su esposa, forman una perfecta pareja.
Nicanor nicanor.wong@gmail.com