Estimada Agustina.
Más que interesante el
escrito de Pilar Urbano. Con su buen estilo y abundantes argumentos
pretende rebatir la
tesis sustentada por Marcus Tank.
Hasta allí no veo problema alguno ya
que a bandazos y a pura controversia avanza el conocimiento. Lo que no me gusta
es que califique de cobarde a quien utiliza un seudónimo y se despache con
descalificaciones al estilo "enmascarado", "(…) rayos y
truenos" y otras al estilo.
Si descendemos al nivel que propone
la excelente periodista, podría yo afirmar que supongo que le encargaron a ella
que contestara la "tesis Tank". Ella bien debe saber que las notas
que comenta no aparecieron en un “ignoto blog” sino en uno que es seguido con
atención por las personas del Opus Dei, cosa que estoy seguro regularmente ella
no hace.
No es la primera vez tampoco que la
señora Urbano deduce tercería. Lo hizo cuando la señora Tapia publicó su libro. En el Hombre de Villa Tévere, Urbano se
dedica a controvertir muchas de las afirmaciones que realiza Tapia. Aclaro que
leí y releí con fruición primero el de Urbano, quedado encantado entonces. Años
después, sobrevenidos muchos desengaños y, entre otras cosas leído el de Tapia,
advertí cómo expresamente Urbano le respondía. Aunque, inadvertidamente, ella
confirma varias de las cosas que Tapia y otros denuncian. Recuerdo que cuando
por primera vez leí que Escrivá se había enterado de que Echevarría se quedó
con una tarjeta de visita de su escritorio y lo reprendió por ello pensé: ¿Cómo
era posible que alguien en tan alto puesto se enterara de que un estudiante se
había quedado con una tarjeta de visita en una mudanza? Al desayunarme de cómo
se procesa el flujo de información en el Opus Dei las cosas se me aclararon.
Me aparté de lo principal.
Bienvenida la periodista, excelente,
repito, Pilar Urbano con un aporte documental más que interesante. Una pena que
lo haga con ese tono de perdonavidas y de mujer "superada" como
podría decirse en el Río de la Plata.
Por último: Escrivá estoy seguro que
se ganó el Cielo porque intentó a su manera, con sus errores y aciertos, ser un
buen cristiano. Pasaran los años y nos vamos a enterar quizás que algunos
documentos suyos fueron retocados por un alma piadosa que quiso hacerlos
"más de él" por el bien de la Iglesia; o que tal o cual doctrina o
práctica es modificada, y seguramente el Opus Dei reformado.
Estas cosas pasan y para ello están
los historiadores. Así pasó, por ejemplo, con Santa Teresita del Niño Jesús.
Sus hermanas modificaron algunos de sus escritos y hasta sus fotografías para
hacerlos más coherentes con la idea de la perfección religiosa que ellas
tenían. Y de instituciones reformadas o desaparecidas ni hablar. Quizás la
señora Urbano podría intentar -si ya no lo hizo- pensar los hechos con
perspectiva, si es que realmente quiere que la verdad -o su más cercano
reflejo- aparezca; además de intentar ponerse en la piel de quienes por una u
otra razón sufrieron y sufren por el mal proceder de una organización que no es
perfecta ni santa. Es una institución con todo lo bueno y lo malo que sus
integrantes tienen.
¡Muchos saludos a todos!
ANARA