Hipogrifos o unicornios.- zartan
Fecha Tuesday, 26 November 2013
Tema 020. Irse de la Obra


Irse como un señor, ¿Irse como un señor? Por mucho que lo pienso no consigo entender lo que significa y estoy de acuerdo con lo que dice Class.

Por cómo me contaron la película, si te marchas eres un desertor y casi todos te consideran –además- un traidor (el desertor simplemente deja de disparar contra el enemigo, el traidor dispara contra ti). No sé si un señor puede seguir siéndolo y simultáneamente ser traidor o desertor. En mi caso, además de desertor, me fui como un ladrón, no hubo ni alevosía ni nocturnidad ya que me marché a media mañana cuando la admón ya había limpiado y todavía no llegaba nadie para almorzar (si quereis hubo agravante de descampado ya que no había nadie en la casa). Llené una mochila con todas mis pertenencias (incluidas dos chaquetas que luego salieron como acordeones), dejé mi misal en la biblioteca del oratorio, me despedí del Señor (recuerdo haberle pedido que Él no me dejase) y salí cerrando detrás la puerta que nunca volvería a abrir.

Dejé la mochila en casa de mi amigo David que se había ofrecido para alojarme un tiempo (hasta que cobrara mi siguiente sueldo y buscara un sitio donde vivir) y volví a mi trabajo antes que pasara la hora que había pedido de permiso en mi trabajo para “asuntos personales”.

A la noche regresé a casa de mi amigo y rescaté de la mochila lo que habían dejado mis veinticinco años precedentes. No era mucho. Fue el primer momento en que realmente me sentí fuera y pensé ¿por qué he de sentirme como ladrón? No he robado nada o, siendo vadecumenalmente estrictos, he robado lo poco que hay en esta mochila: un poco de ropa usada y en mi bolsillo el equivalente a lo que hoy serían unos 15 euros. En ese momento es cuando empecé a sentirme señor, jodídamente pobre pero señor. Señor de mis actos, señor de mi pensamiento. Por tanto no me marché como un señor, fui señor cuando me marché.

Mulan, todo llega pero no tengas prisa. En estos temas las prisas son muy peligrosas.

Orange, ¿como se te ocurre hablar de “apostolado de los ex”? ¡¡Nosotros no existimos ni hemos existido nunca!! Vamos que lo que dices es similar a pedirles que “organicen una asociación para vacunar hipogrifos y unicornios” (hipogrifos pueden ser los agradecidos y unicornios el resto). Además, no hay nada que hacer con nosotros, estamos irremediablemente echados a perder, es inútil perder el tiempo. Creo que utilizas decadentes categorías de pensamiento. Respecto al tremendo cariño y durante tanto tiempo te diré que el día siguiente de mi aterrizaje en casa de mi amigo David este me pasó –sin preguntar- un poco de efectivo (se ve que era notorio que yo no manejaba mucho metálico normalmente), el director del centro se presentó en mi trabajo solo cinco días después de mi huida: mi amigo me quería mientras que el otro … decía que me quería y –por supuesto- no se acordó de preguntarme si tenía recursos para llegar a final de mes, seguro que estaba preocupado de cosas más importantes.

Desde la selva, Zartán







Este artículo proviene de Opuslibros
http://www.opuslibros.org/nuevaweb

La dirección de esta noticia es:
http://www.opuslibros.org/nuevaweb/modules.php?name=News&file=article&sid=21804