En mi caso, puedo confirmar que, como Bruna, tuve también pesadillas, en las que me veía dentro del Opus, sin poder salir. No eran numerosas (una mensual, más o menos), pero sí que tenían fuerza y podían producirme zozobra. Duraron como unos cuatro años, con una fuerza que fue decreciendo hasta, felizmente, desaparecer.
curial