Mi experiencia como supernumeraria.- Lucy
Fecha Friday, 02 July 2004
Tema 010. Testimonios


Mi experiencia

Fui supernumeraria durante 10 años, de los cuales me sentía muy feliz y muy dispuesta a todo lo que se me iba pidiendo y contenta yo de todo lo que se me estaba dando.

Para no alargarme mucho, la cuesta abajo vino desde el momento en que decidí casarme. Ahora supongo que el tiempo que podía dar a partir de ese momento no podía ser el mismo y eso me parece que no era bien visto desde el centro.

Yo en esa época estaba en el Curso de estudios, que la verdad estaba orgullosa de que siendo tan joven la Obra se fijara en mi para poder hacerlo. En ese centro la verdad es que no tuve nunca química con nadie, era como ir de visita a una casa extraña.

La primera anécdota que os voy a contar es que el día de mi boda estaban invitadas dos amigas que estaban conmigo en el curso de estudios y para mi sorpresa no pudieron asistir ni siquiera a la ceremonia porque estaban que casualidad en un curso de retiro a apenas 30 minutos del lugar de mi boda. Comente que si no podían venir al restaurante, al menos a la ceremonia y la contestación fue que no se podía porque iba a ser un mal ejemplo a las demás asistentes.

Al año de casarme nació mi hijo. Nació un sábado de madrugada y al día siguiente solo se aviso a la familia, para al menos estar mas tranquila el domingo. Como no me daban el alta hasta el martes, el lunes fue un correr de gente por el hospital, vinieron del centro de mi marido pero del mío no. Al cabo de un tiempo salió la conversación y me dijeron que no había sido de buen espíritu avisarles tan tarde, que no había tenido a la Obra en la cabeza hasta el día siguiente, que no estaba centrada.

Pasados apenas un mes mi padre enfermo gravemente, desde marzo hasta septiembre que falleció, pasamos día y noche en el hospital. Yo llamaba al centro para ir contando las noticias que por cierto eran cada dìa peor y les decía que no podía ir al Circulo que tenia y debía estar en el hospital desde la mañana hasta la noche porque no podíamos dejar solo a mi padre. Un día apareció la subdirectora en el hospital para hablar conmigo, y le comente que no era el lugar adecuado ella insistió en hablar porque la situación era "insostenible". Le pedía por favor que lo estaba pasando mal y que hablaríamos otro día, insistió e insistió y al final me baje con ella a la cafetería. Hablamos mucho y lo único que sacamos en claro era que yo no podía con todo, algo tenia que dejar y a mi padre en la situación en la que estaba no podía dejarlo. Cuando subí a la habitación mi padre se había arrancado las vías y la impresión que me dejo me marco para empezar a tomar decisiones.

La situación con mi padre se había normalizado y mi marido y yo pensamos en salir unos días fuera para despejarme, llevaba una temporada tomando los famosos lexatines que parece que es lo que todos tenemos en nuestro botiquin. El mismo día del viaje me llamaron del Centro y me dijeron las cosas mas horrorosas que he oído en mi vida, lo que mas daño me hizo fue el comentario de que era la vergënza del centro y que me estaba portando como una persona egoista y barriobajera.

A partir de ese día empecé a pensar en mi y a recuperar mi salud mental y la verdad que no me arrepiento de nada de lo que hice ni de la forma que lo hice. No me fui por la puerta de atrás como querían sino que quedo muy claras mis razones.

Sin más gracias por escucharme

Lucy







Este artículo proviene de Opuslibros
http://www.opuslibros.org/nuevaweb

La dirección de esta noticia es:
http://www.opuslibros.org/nuevaweb/modules.php?name=News&file=article&sid=2146