Siguiendo los artículos referidos a si los sacerdotes de la Obra sugieren o no la nulidad como una opción de resolver problemas matrimoniales entre supernumerarios y cooperadores de cierto interés, mi opinión.

Lo vi alguna vez, algunos sacerdotes recomiendaban esto en casos donde se tiene cierta deuda con las personas en cuestión, típicamente para pagar favores pasados o futuros. Algunos lo hacen genuinamente. De ahí la impresión de que la nulidad es sólo para los ricos, no sólo porque el proceso judicial cuesta, sino porque es sólo a ellos a los que la Obra les puede deber o buscar favores. Llegan a mi mente casos de familiares de ex presidentes que buscaron sus soluciones en juzgados familiares presididos por sacerdotes de la prelatura… felizmente hay tan pocos Doctores en Derecho Canónico que los miembros de la Obra llevan ventaja en diócesis donde los Obispos andan despistados.

Sí me parece un atropello que después de 20 años y 4 hijos, algún sacerdote se atreva a sugerir buscar la nulidad. La nulidad no se sugiere, fue o no fue libre el acto, no es algo que se procura. Creo que en el matrimonio, así como en TODOS los delitos, después de cierto tiempo, debería de prescribir el derecho de nulidad.

Lo mismo aplicaría en lo contrario, como en alguna collazione (La collazione è un termine che può indicare una sezione bibliografica, un' operazione filologica o un istituto giuridico, dal latino collationem) se explicó, un sacerdote que al darse cuenta que no tuvo las licencias del Obispo y por tanto el matrimonio fue inválido por falta de testigo calificado, regresó con una pareja, varios años después, y les explicó que los tenía que volver a casar… a lo que la mujer se negó, “de ninguna manera, yo con éste no me caso!”. Y ahí quedaron los hijos… el tema de discusión fue si el sacerdote hizo o no lo correcto.

Saludos,

unocomocualquiera