La vocación y los adolescentes.- Danni
Fecha Friday, 28 December 2012
Tema 030. Adolescentes y jóvenes


Estimada Calandria:

 

Yo no suelo publicar nada, sólo paso por aquí de vez en cuando. Pero luego de leer tu escrito del pasado 21 de diciembre, me has motivado a hacerlo.

 

Lo que dices con respecto a las edades para pedir la admisión a la Obra es cierto, jurídicamente cierto. El problema es que en el Opus Dei no se respeta la norma, pues existe una tradición “meta-jurídica”, con que todos los días te bombardean en los medios de formación, una de las principales es: “si ya dijiste SI a Dios, no puedes ser ahora traidor, aunque hayas “pitado” a los 14.5, 14.6 o 14.7…”

 

Y como ejemplo te puedo poner mi caso. Que pité a los 14 años y 8 meses. Antes de cumplir un año de haberme incorporado, ya no quería seguir en la Obra. Pero la “presión social”… digamos el “Código Rojo” (recordando la película del mismo nombre que protagonizara Tom Cruise), te decían: “Ya no te puedes echar atrás, traicionarías a Dios”. Cuando me dijeron que hiciera la admisión a los 16.5 años, no quería, pero dije que SI por fuera, cuando hice la oblación a los 18 lo mismo. Cuando hice la Fidelidad lo mismo: Un “NO” interno muy fuerte y el SI externo, pues caso contrario sería un traidor y me quemaría en el fuego del infierno eternamente por una decisión que tomé a los 14 años, 8 meses y 7 días.

 

No Calandria. La realidad es que la praxis dentro del Opus Dei es muy distinta a la norma que ha sido autorizada por la Iglesia (y tú lo sabes muy bien si es que ya tienes 50 años en la Obra). Son las medias verdades, que en relidad son grandes mentiras, como aquello que los colegios de fomento no son de la Obra, pero a los Directores y los del Consejo los nombran en la Delegación o en la Asesoría, pero es otro tema.

 

Recuerdo cuando hice la Oblación, me tradujeron lo que diría en latín de rodillas junto a la Cruz de palo del oratorio; una parte, no lo recuerdo textual, decía: “este período de prueba”, pero me explicaron que era la fórmula que había que usar, pero sabíamos que la entrega era “del todo y para siempre” desde que había “pitado” a los 14 años, 8 meses, 7 días y 16 horas.

 

Salí (luego de 11 años) cuando, ya enfermo, me di cuenta de que no tenía la vocación; entendí bien la filiación divina, Dios no me podía pedir que siguiera en algo que no era para mí, pero esos pensamientos eran del diablo, me decìa el sacerdote de la Obra... Lo que no entendí, ni entiendo ahora, es por qué me hicieron eso, y por qué lo siguen haciendo a otros.

 

Ahora bien, el problema no está en que pidan su admisión los jóvenes con permiso de sus padres a los 14.5 años (como aspirantes o no), sino que NO SE RESPETE el período de prueba como una etapa en que candidato y la Institución puedan validar si existe o no vocación. Podrás rebatir este correo con miles de textos de los reglamentos internos, pero como en la película "Código Rojo", los que estuvimos ahí, sabemos que es cierto, aunque no esté escrito, tan cierto como la hora de la comida o el baño de la mañana, que tampoco están escritos.

 

Saludos

 

Danni









Este artículo proviene de Opuslibros
http://www.opuslibros.org/nuevaweb

La dirección de esta noticia es:
http://www.opuslibros.org/nuevaweb/modules.php?name=News&file=article&sid=20652