DanielM ha recogido una oleada de críticas a su respuesta a Lapizla y su inopinada patada intelectual a Agustina.
Daniel: te has pasado. Por una vez voy a llevar la contraria a Agustina, porque el asunto lo merece. Incluso haciéndolo, creo que puedo reconvenirte. OpusLibros, como dice Agustina es una página aconfesional: la religión de cada uno no importa, lo que importa es el respeto, sobre todo tras pasar por una institución tan irrespetuosa como el Lado Oscuro...
Eso no quiere decir que la gente que ha estado en el lado oscuro, o sigue estando no pueda manifestar sus creencias religiosas (y de hecho lo hace, con total libertad), puesto que eso es lo que le llevó a ese lado. Y ese lado con frecuencia le ha dejado una huella indeleble en su vivencia de la FE. Esto es importante, pues mucha gente sigue luego con complejos no sólo sobre su pertenencia al Lado Oscuro (el arcano ese del vínculo contractual), sino sobre la propia Fe, el rejalgar y demás. Y en Opuslibros, se intenta ayudarles de la mejor forma que se puede.
Ahora bien, bastante gente sale del Opus con la Fe muerta - matada, con la fe en la Iglesia por los suelos, o simplemente harta de todo. Esto, a algunas personas les lleva a un sano escepticismo, como es Lapizla. Y vas tú y lo que haces es darle una patada en su sincera presentación. Mal y mal.
Veamos, Daniel: el hecho de que tú estés convencido de que tu forma de vivir la fe sea la mejor, no quiere decir que otros lo hagan mal. Eso lo sabes. Y si no lo sabes, debieras plantearte qué es lo que te lleva a estar tan seguro de ti mismo ¿No hay rendijas en tu armadura? ¿No hay nada de lo que no estés tan seguro? ¿O de verdad te crees que la Iglesia es capaz de contener toda la verdad, toda la salvación, a todo Dios? Vamos, hombre. ¿Crees de verdad que Dios les va a tener en cuenta no creer en la Santa Iglesia Católica? ¿En la curia Vaticana con toda su corrupción, sus líos, sus abusos de y con el poder? Venga ya. Yo hasta diría que es sano no creer en ellos para seguir creyendo de verdad en la Iglesia como Cuerpo Místico de Cristo.
La respuesta que das es de manual de la iglesia integrista actual: son unos pobres desgraciados si no creen en lo que nosotros creemos, tal y como lo hacemos. Pues no, esa respuesta, como te decían otras personas, es la del Fariseo, que miraba al publicano con desprecio: "te doy gracias, Señor, porque no soy como ese de ahí...." Mal vamos, aunque se a la postura oficial, es lo contrario al espíritu del Vaticano II, y del Evangelio. Ignoran que al final, lo importante es si esas personas como Cristo "pasan por el mundo haciendo el bien", no rezando rosarios o yendo a misa o a las audiencias del Papa. Cosas en sí mismas no malas, pero que son medios, no fines. En última instancia: ¿no actúa la iglesia contra una institución que consigue tasas record de pérdida de la fe? (según el propio manual, quien pierde la fe va derechito al infierno... y según Jesús, el que se la hace perder, mejor se tiraba al mar con una piedra de molino al cuello).
La respuesta que das al final de tu segunda respuesta, es de machismo acabado: ahora se lleva en el ambiente integrista denigrar al feminismo, y cualquier iniciativa que éste proponga. Pero te vas por la tangente. Si se te contradice, no es porque respondas mal a una mujer, sino por responder mal a secas. Ella te había respondido lo que yo te habría dicho. Quítate de la cabeza la conspiración feminista, no existe, es más bien al revés: las mujeres tienen que luchar cada día por el espacio que duramente han conquistado. Y si no, mira el plan que tienen las numerarias auxiliares en el Opus.
Y tus argumentos en tu respuesta a Atomito son igualmente fútiles no se puede responder a una crítica racional como la suya con un argumento ad hominem y teológico. La fe pertenece a otra categoría, y por tanto no puede competir con esos argumentos en igualdad de condiciones. Sales trasquilado. Y yendo al argumento ad hominem, te recomiendo a todos la foto de Atomito en " ¿Quiénes somos?". No me digas que no te gustaría estar en su lugar aunque sólo fuera una vez. Aunque no crea.
Que dios os guarde
Ramón
