Pensando ha conseguido su objetivo. No puedo negar que la carta de Victor me dejó perplejo, pero también me capturó el argumento de Pensando. Lo resumo torpemente: Dado que la depresión es un asunto biológico, Victor hubiera terminado igual si no hubiera sido de la Obra, por tanto la Obra no tiene responsabilidad, seamos prudentes antes de juzgar!
Como Xavier de Barcelona bien comenta (y yo que pensaba que escribía de forma rebuscada!), de las dos corrientes para atacar problemas de depresión crónicos están el enfoque psicoterapéutico y el biologista (sic). Dentro del psicoterapéutico está la tendencia sistémica que culpa al sistema al que perteneces… entonces ¿fue Victor víctima o es un victimista (es decir se hace pasar por victima)?...
Creo que todo subconjunto de la sociedad tenderá, por virtud del teorema del límite central, a comportarse similar a la población que representa (si la muestra ha sido aleatoria). De ser así, es esperado que el Opus Dei, de ser una muestra aleatoria, tuviera el mismo porcentaje de enfermos depresivos que la sociedad. (Nótese que si la muestra no es aleatoria, se concluye desde ya que el Opus es anómalo). Veamos el asunto con más detalle.
Unos datos (cfr. American Society for Suicide Prevention) en USA, 19M de personas sufren de depresión (7% de la población). Las mujeres sufren el doble de depresión que los hombres. Dos terceras partes de las personas que se suicidan sufren de depresión, aunque la mayoría de los que están deprimidos no sienten impulsos suicidas. 15% de toda la población sufrirá de alguna forma de depresión en algún momento de su vida.
De la misma fuente, en el mundo, cada año hay 1 millón de suicidios, aunque hay de 10 a 20 veces más intentos. Durante los últimos 45 años, la tasa de suicidios se ha incrementado hasta un 60% en algunos países. Alrededor de 100,000 adolescentes se suicidan cada año.
Y al punto, ¿Se puede decir que el índice de deprimidos en el Opus es mayor menor o igual que lo normal? (¿Que es lo normal?)… es difícil, nuevamente tenemos los datos externos, pero no los internos… sin embargo algunas observaciones basadas en mi experiencia:
1. En los centros donde viví, hacia la segunda década de mi estadía en la Obra, éramos entre 10 y 15 personas, y en todos ellos, había al menos una persona deprimida en estado crítico, y otras dos en estado controlable.
2. La obra se encargaba, maternalmente, de distribuir bien a los deprimidos entre los centros para no cargarle la mano a ningún director, que bien podía estar deprimido.
3. Hacia el final de la segunda década de mi estadía, los directores decidieron, por inspiración divina y la infalibilidad propia de la gracia de gobierno, de mandar a sus casas a los deprimidos que no eran VIP. Es decir aquellos cuyas familias no hubieran donado haciendas, o que no fueran sacerdotes. Por tanto la población descrita en 1 estaba diezmada.
Estas observaciones me hacen pensar, ante el escándalo de Pensando y el victimismo de Xavi, que sí existe una duda razonable para sostener la hipótesis de que en el Opus no se comporta normalmente la aparición de deprimidos. Ojo!, puede ser porque los crea, o porque los atrae (yo siempre me encontré rarito, ¿no han notado cuánto raro hay en el Opus?.
Entonces, primero, si es porque los crea, como la opinión de algunos, más calificada que la mía en temas psiquiátricos y psicológicos, sin duda el Opus y sus directores tienen responsabilidad… aquello que algún sacerdote director me comentó alguna vez… “tenemos una epidemia de depresivos, es seguro ataque del demonio”. Hasta el mismo Consiliario en mi antiguo país está deprimido!
Segundo, si es porque los atrae, eso significaría que el espíritu de la Obra es especialmente llamativo a los enfermos, y que ellos, una vez dentro empeoran pues tratan de resolver su condición médica mediante un ascetismo exagerado. Caso similar al de Steve Jobs que trató de curar su cáncer a través de una dieta vegie. Por tanto, si el espíritu de la Obra empeora la condición de los ya enfermos, entonces los directores también tienen responsabilidad.
Me declaro confundido, no sé que es mejor, si la opción uno o la dos. Pero si entiendo, poco, que en ambos escenarios existe una responsabilidad de los directores del Opus Dei.
Eso creo yo.
Unocomocualquiera.
