Hola necesitoayuda,

La buena noticia es que tu hijo habló contigo. Eso es un paso tremendo. Para tratar con el opus, yo te recomiendo no ir con medias tintas. Si vas a hablar con ellos muy suave, van a tratar de darle la vuelta al asunto, esperar un tiempo si acaso, y volver sobre el tema con tu hijo.

Si es menor de edad probablemente puedes demandar -dependiendo del país donde vivas-. Tal vez hacer una denuncia a algún instituto de protección al menor. Los puedes amenazar de hacerlo si no dejan tranquilo a tu hijo, por si hacer la demanda como tal resulta muy problemático, cosa que depende de tus circunstancias.

Qué más hacer depende de tu hijo. Si sólo va al club, no hay tanto problema. Si va a un colegio del opus, pues la cosa se pone mas dificil. Si sólo va al club, con una amenaza judicial y no llevarlo más deberia bastar. Si el director es jóven, tener una conversación directa y al grano puede ayudar.

El problema es a largo plazo. Una vez que un muchacho está fichado a los 15, si sigue asistiendo al club, le tendrán el ojo puesto. Puedes estar seguro. Te recomiendo de corazón no llevarlo mas al club. Pero tienes que hablarlo con él. Si es una imposición tuya, puede que lo manipulen para que vaya a escondidas. Lo mas importante es la confianza entre uds y su hijo.

Ten en cuenta que el director no obra con malas intenciones. Hay una alta probabilidad de que verdaderamente crea que tu hijo tiene vocación divina. Pero esto lo hace más peligroso lamentáblemente. Ellos sólo cumplen una misión divina, y piensan que tu hijo debiera ser parte de ella. Ahora, como en la obra lo que importa es la obra, si hay una posibilidad de que la institución salga perjudicada dejarán todo como está y no buscarán mas a tu hijo. Por eso la amenaza de una denuncia es importante.

Si tu hijo habló con ustedes, tienen mas de la mitad del problema resuelto. En serio. Se ve que es listo. Habla con él, y no andes con medias tintas con los directores.

Una última cosa: si el director es muy joven, el que manda de facto es el sacerdote.

Saludos y mucho éxito. No me quiero imaginar cómo me pondría si mi hijo me contara lo mismo.

Cauchi