¿Usted también, Manzano?.- Diletante
Fecha Monday, 16 July 2012
Tema 900. Sin clasificar


¿Usted también, Manzano? ¿También usted es tan osado de pretender comprender el fondo de las almas, de medirlas, pesarlas y decidir sobre su salvación? Dice usted, refiriéndose a mí: “Por tanto, ahora más que nunca y al leer a esa pobre alma amargada y anegada de fracaso, me siento mejor que nunca. No te olvidaré en mis plegarias amigo, gracias, pero si encima te defecas tan agriamente sobre la cosa, demuestras sin duda que ahí dentro tampoco curaron tu dolorosa afección psicótica”.

1. Supongo que lo de rezar por mí (se lo agradeceré infinito si lo hace) lo dice en serio. Yo, al menos, no me atrevo a jugar con estas cosas. Lo que ocurre es que no suena muy sincero, ¿no cree?. Para rezar se necesita hacer un ejercicio de “contextualización”, de ponerse en la perspectiva adecuada, que es la de la criatura ante su creador, la del redimido ante el redentor que lo salvó con su vida, la de la nada frente al infinito, la del hijo ante el Padre… No sé yo si la suficiencia y desprecio que encierra en su frase se compadece con la actitud que conduce a una oración sincera. Pero allá usted con lo que hace. Si le va lo de despreciar; si le pone, digámoslo así, “cachondo”, y además usa su desprecio como escabel para acercarse a Dios, no sé si se elevará mucho, o si lo hará de un modo similar a la Torre de Babel. No obstante, si su oración es sincera se la agradezco de todo corazón.

2. Respecto a lo de defecar… ¡No sea usted cursi, por favor! Se dice –y más aún en este contexto- cagar. Si yo quisiera cagarme en su padre (y dejo claro que no es así), nunca diría “defeco sobre su progenitor”. No. Lo castizo es “me cago en tu padre”. Además… ¿Qué manía hay en España con las heces? Uno se caga en diez, otros lo hacen en la mar (o el mar), los hay que prefieren hacerlo en su puta madre… ¡Qué mal gusto! Yo lo hago cuando mi aparato digestivo me da señales inequívocas de que es necesario, y siempre en el inodoro, sanitario, váter o como quiera usted llamarlo. Ahora que si lo de caca, culo, pis y demás manías infantiles le resultan atractivas, no seré yo el que se interponga entre usted y la mierda. Dice usted también: “aprovecha la ocasión y la web para contrarrestar y edulcorar los contenidos habituales, es decir, nuestras experiencias vitales, y así quedar como un machote con sus amiguetes del alma, pues tal vez le salga el tiro por la culata, porque con talante destemplado o con ironía, más de uno le puede decir lo que no le gustaría oír”. ¿Peo de verdad es usted tan obtuso? ¿De verdad piensa que sabe quién soy? ¿Está seguro de que escribo al dictado de alguien diferente de mí? ¿En verdad tiene la más mínima idea de lo que me gustaría o no me gustaría oír? ¿Se lee usted a sí mismo? ¿Es consciente del grado de totalitarismo sectario y aniquilador que hay en su pretensión de encasillar a todos según su pensamiento? ¿Todavía se cree que el mundo puede explicarse como una lucha de clases? ¿No se da cuenta de que comentarios como éste suyo, o como el de algún otro histérico desatado que merodea por aquí, dejan a este foro con un nivel de objetividad no muy superior al de una página web dedica da a los OVNIS o UFOS? Y todo por ser un disidente. En la Obra, cuando disentí, y fue más de dos y de tres veces, y en ocasiones por asuntos muy serios, nunca me despreciaron como lo hacen algunos en este foro. Pero lo más gracioso, lo que resulta verdaderamente estupefaciente, es que los más altos despreciadores se quejen de que en el Opus los despreciaban encasillaban y anulaban. Lo peor de usted, con todo, es que miente. Yo no pretendo edulcorar sus experiencias ni las de nadie. A diferencia de usted, yo pienso –y lo creo firmemente- que cada uno vive su vida como le da la gana. Tal cual. Si una experiencia la percibe como drama o como algo doloroso, así es. La realidad de todo lo vivido tiene un carácter marcadamente subjetivo, ¿cómo voy a empeñarme en decir que alguien que ha sufrido por el motivo que sea, en realidad no ha sufrido? ¿Quién soy yo? ¿Quién es nadie para decidir sobre ello? Simplemente me permito apuntar que, mirando siempre hacia atrás, no se supera nada. Y que recreándose en recontar morosa, casi avariciosamente los males que uno sufrió en una determinada etapa de su vida, no se soluciona nada. La cuenta exacta de las ofensas recibidas (cuya realidad no niego, ni siquiera mitigo) no es método para salir de ningún hoyo, más bien al contrario. ¡El odio consume tanta energía…! Algunos de los escritos que voy leyendo aquí parecen elaborados para ganar un concurso de agravios. Ya no se trata de construir nada a partir de una experiencia dolorosa sino de destruir. A esto se puede objetar que es imposible construir sin destruir previamente a la gran Babilonia, pero es que yo no considero que la Obra sea la gran Babilonia. ¿Que a algunos o incluso muchos nos fue mal? Sí, pero aquí es donde digo que si uno no empieza por reconocer su parte, si uno se hace irresponsable (en el sentido más literal del término) como un niño y no asume que en una relación uno mismo constituye una de las partes, entonces todo está perdido. No se entenderá nada. No se madurará. Si ante una experiencia de dolor y calamidad, incluso de catástrofe, uno trata ante todo de salvar su propia persona y coloca a su yo fuera del alcance de todo, como si no estuviera sujeto a responsabilidad, mérito o demérito, nunca se estará en el mundo como persona cabal. Partiendo de esto, puede criticarse a la otra parte. Puede verse en qué falla, que vicios tiene, qué procedimientos son desafortunados (incluso reprobables), qué personas concretas hacen cosas malas de manera habitual, qué errores se cometieron con uno mismo y qué malicias se llevaron a cabo contra la propia persona. Pero sabiendo que es para mejorar y ayudar, no para melancolizarse o encolerizarse. El odio, la cólera, el desprecio, son pasiones auxiliares si sirven para algo positivo, pero en sí mismas no tienen razón de ser. Dicho esto, si usted, Manzano, quiere seguir simplificando el mundo: bueno-malos, amigos-enemigos, de los míos-de los otros… Pues muy bien. Allá usted y su secta.

Diletante









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