Hola a todos,
gracias Haenobarbo por el recordatorio, difícil resistir a los encantos del poder. Efectivamente pasó lo que cuentas y otras afirmaciones desconcertantes del señor cardenal en los años de su jubilación. Tras el ascenso de Juan Pablo II y Ratzinger en la Congregación de la Doctrina de la fe, nuevos vientos corrieron en la iglesia. Nos sirve como ex Opus "formados" en las idealidades y la ceguera para comprobar el aspecto político de los asuntos que rodean a las jerarquías. Ello no quita para reconocer que había una voluntad de cambio en curas y obispos españoles en los años sesenta, eso existió, es conveniente ponerlo de relieve así como que el Opus Dei ha contribuido como una fuerza mayor a que toda esa esperanza se frustre, en nuestro país y en la iglesia universal.
Tú sabes como yo que han perseguido uno a uno hasta sus últimos refugios a todo teólogo y obispo que no fuera de su agrado. Son responsables de los episodios inquisitoriales que hemos contemplado. Van barriendo cual apisonadora todo lo que no les gusta.
En 1981 había un Papa favorable al Opus, hablamos de ello no hace poco, de los orígenes de la relación entre el cardenal Wojtyla y el Opus Dei. ¿Qué va a hacer y decir un cardenal si la más alta magistratura de la iglesia está favoreciendo descaradamente al Opus? También los obispos españoles mostraron su disconformidad con la erección de la prelatura personal en sus visitas ad límina antes de dicho acto pontificio. Como en la iglesia manda uno sirvió para absolutamente nada. La prelatura salió con la opinión en contra de los obispos del país en que más Opus Dei hay de la tierra.
Hoy en día observamos a los opusinos en los debates defendiendo a obispos, curas y hasta a las monjas en el caso de los bebés robados. Yo "flipo" como se suele decir. Todo conveniencias políticas, es penoso que la iglesia haya caído en sus manos de esta manera. No nos queda más que espabilar con un poco más de conocimiento y reflexión.
Reitero mis gracias y felicitación a Vega por su esclarecedor último escrito.
El tema homosexualidad al que también hace referencia Ramón más vale no menearlo. Supongo que Vega sabe más de esa cuestión, qué nos dice la psicología profunda y la no tan profunda sobre las obsesiones doctrinales que padecemos. Me refiero a Drewermann. Lectura terriblemente demoledora sobre los profundos porqués de ciertas llamadas divinas... Qué mundo tan desconocido el de las profundidades de la psique humana. Es estremecedor cómo el Opus utiliza todos los resortes más íntimos de las personas, nuestras debilidades a su favor y también nuestros puntos positivos. Me entran escalofríos.
Sobre Nietzsche y Escrivá, me imagino a Escrivá leyendo al tal Sellmair si era un reformador religioso en la línea. No me imagino a Escrivá leyendo a Nietzsche ni en sueños, demasiado ateo para un cura. Y de todas formas nunca lo sabremos, ¿cómo saber qué libros tenía el señor Escrivá en aquellos años 30? yo no lo veo lector, más bien "correteador", lo que no dejaba hacer a los demás. Me decepciona un poco saber que hasta el Opus lo hemos tenido que ir a copiar de un alemán, ¿no tenemos ni una sola idea propia en este país?
Ana Azanza
