Hola a todos.
Quisiera libremente también comentar algo de mi experiencia dentro del opus dei como numerario. No quisiera yo seguir y seguir diciendo opiniones personales a fin de aburrir a quien lea lo que escribo, sino explayar algo que quiero decir.
Creo que la espiritualidad de la iglesia puede ser como el agua, que la toma uno fresca y da vida, o acompaña a una vida mejor. El opus dei, en lugar de agua, da coca cola helada.
Al salir del opus dei me sentí triste porque me habían acostumbrado a tanta exuberancia. Pero eso es una cosa artificial, artificiosa, falsa. Me tardé mucho tiempo en pasar de esa realidad a otra, pero al final, no hay nada como la verdad.
Saludos y gracias.
Paiquito