Dionisio, desde el Aeropago, escribe sobre el asunto de las rodilleras. El que fue a decirle que el tema era delicado y que era mejor no mencionarlo, al menos no lo negó. Yo puedo asegurar, bajo la gravedad del juramento, que el propio Alvaro del Portillo contó muy divertido el sucedido en una tertulia en el Colegio Romano en la que el suscrito estaba presente.

Respecto a lo que ha contado Ex – apéndice, no me extraña en absoluto, solo que en mi caso particular habría que decir lo que has oído no es verdad. El propio prelado del Opus Dei, Javier Echevarría, me lo hizo decir por medio de altas jerarquías regionales.

En este caso concreto lo que me dijo don Alvaro y que es muy largo para contar, no solo que me sirvió y me sigue sirviendo para amar a la Iglesia y al Romano Pontífice “a pesar de los pesares”, si no que fue literalmente cierto. 

Lo más triste de todo es que ellos, me refiero a Echevarría y sus adláteres, piensan que aquello podría empañar aunque sea mínimamente la impoluta figura de santidad de del Portillo: yo, a pesar de los pesares, sostengo que en cualquier caso al haber hecho bien a mi alma, la engrandecería aunque sea una milésima de milímetro….. allá ellos, yo he mandado mi testimonio escrito al tribunal de Vicariato de Roma.

Haenobarbo