Entre los estrenados ministros del nuevo gobierno de España hay un destacado miembro del Opus Dei que ocupa un ministerio especialmente importante.

Tener en España un Ministro del Opus Dei, institución condenada en el Tribunal Supremo por conculcar derechos fundamentales, es una situación de alto riesgo para la democracia.

El Prelado y los directivos del Opus Dei están de enhorabuena porque podrán fácilmente tener acceso a lo que más les interesa: las informaciones más secretas, confidenciales y mejor guardadas de la región primogénita.

Poco a poco, con un eficaz trabajo, el Opus Dei está copando puestos en las altas esferas de las jerarquías de la Iglesia y los Estados.

MarisaL