Encontrarás… deudas.- Segundo
Fecha Friday, 15 July 2011
Tema 100. Aspectos sociológicos


 

“Es peligroso jugar con la realidad”

John Le Carré

 

Ha transcurrido el tiempo suficiente para realizar una evaluación objetiva de “Encontrarás Dragones”. La película no ha merecido el elogio de la crítica especializada y desde luego ha sido un fracaso de público y por ende, de dinero. De modo que hasta el momento más que encontrar “dragones” el Opus Dei sencillamente encontrará deudas (si es que no invirtió su propio dinero a través de sociedades interpuestas, testaferros o cualquiera de clase de artilugios jurídicos-económicos).

 

El filme refleja, en primer término, esa irrefrenable tendencia de la organización a manipular su pasado y en particular, la figura de Escrivá. Resulta difícil conciliar al personaje real con el que se presenta en la ficción; hay demasiados elementos que tachar, corregir y enmendar.

 

Asimismo se exhibe sin pudor alguno esa veneración acrítica e infantil de la figura de un fundador conflictivo al que se pretende transformar en alguien querible, cercano, admirable a la sensibilidad contemporánea. La tarea no sólo es difícil sino más bien imposible; es que no hay forma de hacer simpática la figura de Escrivá.

 

Comentado la película un amigo hacia el siguiente comentario. Imagina por un momento un show de Paul MacCartney en Rio de Janeiro; mas de 50.000 personas están esperando eufóricas la aparición de Paul. En las pantallas gigantes de pronto aparece la imagen de Teresa de Calcuta y la gente estalla en vítores y aplausos. Luego aparece la clásica imagen de Escrivá, el público queda por unos instantes desconcertado, luego los silbidos son cada vez más fuerte mezclados con unos tibios aplausos de algunos distraídos. De nuevo la imagen de Teresa y con ella la euforia. Los organizadores implacables continúan mostrando sucesivamente las imágenes de ambos santos a las que corresponden los aplausos y la silbatina en una cadencia bien brasilera. La moraleja que sacaba este amigo es sencilla: el mensaje evangélico se percibe de inmediato y entusiasma incluso en un show en Río.

 

En la Iglesia los franciscanos tienen su pobreza, los benedictinos su “ora et labora” de modo casi con una sola palabra pueden definir su carisma particular. Escrivá nunca pudo exhibir un carisma nítido donde el evangelio fuera fácilmente percibido. A todos los que cooperamos en la Prelatura nos dijeron que Escrivá tuvo una revelación particular el 2 de octubre de 1928 pero a la fecha nadie sabe qué vio. A la vez lo que se expone como carisma – santidad en el trabajo - se desfonda de inmediato cuando se lo transforma en objeto de estudio.

 

Sin carisma, incursionando en frivolidades “religioso-cinematográficos” con un despilfarro de dinero que da vergüenza ajena, negando reparaciones que en equidad y caridad corresponden no es de extrañar la actual implosión del Opus Dei. Es que la Prelatura hace años que se lleva mal con la realidad y muy bien con la organización y el dinero. No es fácil reconocer allí el evangelio.

 

Segundo









Este artículo proviene de Opuslibros
http://www.opuslibros.org/nuevaweb

La dirección de esta noticia es:
http://www.opuslibros.org/nuevaweb/modules.php?name=News&file=article&sid=18237