Hola Orejas,

Escribe Agustina que una persona del Vaticano, cercana al Papa, le ha comentado que todo lo gravísimo que sucede en el Opus se está comunicando y lo de los Legionarios, de forma indirecta, tendrá repercusión. No voy a ser derrotista: es mejor eso que nada. Ya era hora de que al menos reconozcan que hay un problema.

Pero hay cosas que no se entienden: no es de recibo que el Vaticano se entere ahora de que en el Opus Dei hay lo que hay. No es de recibo que digan ahora que se están enterando, cuando desde OpusLibros se escribió una carta, hace varios años, y cuando existen testimonios como el de Fisac o el de María Angustias, que lo contaban, pero ¡hace más de 30 años!

O una de dos: o no han querido enterarse, o son tontos. Y yo creo que en el Vaticano hay pocos tontos. Ahora va a resultar que BXVI, el gran inquisidor, el que ha perseguido hasta la saciedad cualquier vestigio de heterodoxia, resulta que "no sabía nada". Igualito que con los Legionarios, que eran modelo para la juventud. Y ¿cuándo van a actuar? ¿O es que la indirección va a ser sinónimo de inacción?

Y una cosa más: tiene narices que lo que les preocupe sea el orden espiritual, siendo este muy importante, pero habiendo otro orden tan importante como aquél, que es el material y de justicia social: las cotizaciones sociales, los sueldos, la situación patrimonial de los que se van, la ayuda debida a los que se van habiéndolo dado todo de su vida... ¿O eso no lo van a mirar?

Cuando las colonias americanas se rebelaron, había un principio claro: "no hay tasación sin representación". Es decir, no pueden esperar que confiemos y cooperemos con la Iglesia de Roma, si cuando hay problemas, se lavan las manos, no oyen, cuando oyen no hacen y cuando hacen es por vía indirecta.

Ellos sabrán.

Ramón