He visto la película “Encontrarás Dragones” y flipo, alucino, rio o lloro, no sé, no tengo palabras... qué triste.
¿De cuantas maneras se puede contar una historia?
La película no creo que tenga éxito a nivel comercial, no es seria desde mi punto de vista.
La visión de La Guerra Civil española es de pandereta y castañuelas. Y luego la visión que se da de San Josemaria es infantil, solo alguien que haya leído otras biografías de San Josemaria, y conozca el Opus Dei y lo que hay, detrás del umbral, puede entenderla con rigor.
La película mezcla tantas ideas que al final uno sale más mareado que un pato. La santidad de San Josemaria, el amor libre en el bando republicano, la bestia parda del amigo-enemigo Tomas, Los Requetés y la CNT. El manicomio donde se refugió San Josemaria con las profecías de la hermosa psicótica. El paso de Los Pirineos, la Flor de Rialp y las sopas de ajo.
La infancia de San Josemaria, su familia, la fábrica de chocolates del padre de San Josemaria. Su pelea con otro seminarista, Tomás, coprotagonista de la película, dos vidas un ángel y un demonio, del mismo pueblo y amigos de la infancia. La dependencia psicológica que San Josemaria crea en este amigo. Josemaria niño que llega a crear el Opus Dei y ser Santo y el otro niño, Tomas, que se convierte en un monstruo, una mala bestia, eso sí con buenos sentimientos y por el Amor Misericordioso de Dios y la ayuda de San Josemaria al final se salva.
Como muestra un botón, la anécdota de la defensa de la pureza y la llave del piso. A uno le habían contado en mil charlas y había leído que San Josemaria, furibundo, tiró la llave a la alcantarilla para defender su pureza, cuando un hijo suyo le ofreció, una llave para ir a esconderse a un piso donde había una chica joven. Siempre me pareció de niño maleducado lo de tirar la llave a la alcantarilla, lo normal hubiera sido decir a su hijo, no puedo ir a vivir allí, dale las gracias y devuélveles la llave. Como para hacer copias de una llave en plena guerra.
En la película, ya no hay llave, ni alcantarilla, ni San Josemaria está furibundo, ahora se explica de otra manera: San Josemaria debido a la persecución religiosa en la Guerra Civil, está confesando de forma camuflada, en una plaza, y una chica joven que se va a confesar le ofrece su casa para refugiarse. San Josemaria, cariñosamente le dice que ella es muy guapa, y él aunque es sacerdote es un hombre, ella le sonríe y ya no se acaba de confesar y le da un beso por sorpresa en la mejilla ante la mirada atónita de sus hijos.
Y otras anécdotas muy populares de San Josemaria, que ahora se cuentan de otra manera, con lo cual uno sale con la sensación de que le contaron un cuento, y ahora el cuento se cuenta de otra manera. Es como el gag de los hermanos Marx en la película “Con faldas y a lo loco”: “Estos son mis principios, pero si no le gustan, no se preocupe, tengo otros”. Antes teníamos una vida de San Josemaria, pero no se preocupe, si no le gusta la versión anterior, tenemos otras versiones para contarle.
Y el final de la película y la frase final que justifica el titulo de la película. En el corazón de cada persona hay un lugar donde encontrarás dragones. Para mi está incompleta la frase, debería seguir diciendo y en el Opus Dei, señor espectador, no se asuste, también hay, hechos, cosas y lugares donde encontrará dragones.
La película me hizo reír, me dio pena, me hizo alucinar, me gustó, me sirvió como psicoterapia y la recomiendo, especialmente a los ex.
Dios nos cuide.
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