Desde que empecé a leer en opuslibros, hay dos tipos de escritos que cuando menos me producen algo de ansiedad, no podría referirme a ellos porque me falta tiempo para buscarlos, además así se verá que no me dirijo a nadie en particular, vaya por delante que admiro la libertad que ofrece esta página en la que cada cual escribe lo que necesita escribir.

Uno de ellos son los que comienzan por: he ido al cine, he visto una película… “la Isla”, “La duda” o he pasado por una Iglesia y he escuchado la homilía… y a continuación algo así como y he pensado… y vienen comparaciones con el opus. Los  otros son los de contenido poco respetuoso, que generalmente son respuestas a algún otro escrito.

No estoy en posesión de la verdad y puedo equivocarme, pero no me parece una cuestión de formas, es más bien una cuestión de fondo, a veces tengo la sensación de que hay aún personas que no están realmente desvinculadas, y el opus sigue haciendo daño en sus vidas. No pienso que sea bueno ni para la mente ni para el espíritu, andar por la vida buscando o encontrando este tipo de referencias. Creo realmente que para rehacer nuestras vidas es preciso romper los vínculos, sean del tipo que sean.

En cuanto a los de contenido llamémosle “alterado”, suelen ser contestaciones a otros escritos, a veces a personas, que se han atrevido a escribir estando dentro.

No sé si se nos olvida que nosotros éramos ellos y  que como se nos puede contar por miles, somos variados, tan variados como sus experiencias o las nuestras, algunos tuvieron la suerte de “saber” o de “ver” estando dentro lo que pasaba, pero por lo que he leído, la mayoría no éramos conscientes, como lo confirman los escritos, y han sido estos los que nos han facilitado argumentos que precisábamos para armar nuestros propios rompecabezas. ¿Por qué entonces tanta furia? ¿Acaso los ex no hemos hecho a otros el mismo daño sin ser conscientes? O siéndolo.

Dejémosles escribir, me ha parecido estupendo el escrito de Aquilina del lunes 14 de marzo.

Verdaderamente si escriben es porque lo han pensado. En mi época  a eso, que es sentido común, se le llamaba falta de unidad y ni se te ocurría pensar por tu cuenta, por lo que opino que ya es un cambio, creo que Aquilina tiene razón.

No sé si será la edad o el largo tiempo que llevo viviendo fuera, con muy diversas experiencias que no se viven allí, pero es bueno para cada uno de nosotros “mirarlos” con paz, y con la certeza de que todos estamos en las manos de Dios.

Felicidades a los Pepes Y Pepas y a los valencianos con sus fallas.

Janabenito