Querida Isabel:
Gracias por tus letras.
Me gustaría ser más joven, pero esto es imparable. Hace años peinaba canas. Desde que se me cayó el pelo, pocas. (Entré en la institución (entonces insituto secular, a saber, religiosos) a finales de los 70, y profesé en el Opus Dei los votos de pobreza, castidad y obediencia a comienzos de los 80).
Seguro que logras demostrar lo que persigues, que es muy legítimo. Te ayudamos. Un saludo.
OBiedo.