Hola a todos.

Quisiera comentar algo sobre el último escrito de Haenobarbo cuando habla de la imposibilidad de auto crítica dentro del opus dei sin sentir que se traiciona la idea fundacional.

Mi comentario es el siguiente: ¿el mismo nombre "opus dei" es inspirado también? Creo que desde el nombre hay una imposibilidad para criticar sanamente al opus dei, pues nadie puede juzgar algo que en teoría es superior a él, especialmente en temas religiosos y no sentirse un agresor de algo santo.

Creo que el opus dei debería auto corregirse, si quiere convivir amablemente con todos, especialmente los que en algún momento van a creer en él. Una de las cosas que puede intentar es el analizar si el nombre "opus dei" es una tradición o es algo fundacional. Si fuera una tradición, el cambiarse de nombre y enfatizar algún aspecto fundacional, pues le ayudaría a considerarse más como humanos, como un grupo de creyentes que persiguen un ideal común, capaces de aciertos y errores, pero con un ideal de perfección cristiana. Y además ayudarían a los que recibirán la invitación a unirse, para que lo hagan desde una perspectiva más real.

Quisiera agregar que la misma idea de "opus dei" tiene un matiz "sacramental", es decir, que todos nos queremos unir de alguna manera a Dios. Pero por otra parte, el opus dei como organización no quiere recibir a todos y le hace la guerra a quienes no se asimilan a sus reglas. El resultado es que los que se alejan de las reglas o de la organización pues se sienten alejados de Dios. Quizá resulte difícil el suponer que pasa algo así, pero es cierto.

Por último, si todo dentro del opus dei es perfecto, me refiero a lo institucional, pues como dice Haenobarbo, no le queda más que salirse con la suya y sobrevivir, como otros lo han hecho.

Saludos.

Paiquito