Es la primera vez que escribo en esta pagina, fui agregado de la delegación de  México,  y acabo de abandonar el Opus Dei, no hace mucho.

Bueno, el motivo por el cual escribo es para hablar sobre lo que viví y de lo que fui testigo, en un colegio del opus Dei.  Dicho colegio se encuentra al oriente de la ciudad de México,  en la llama zona metropolitana o valle de México, bueno esta escuela de educación primaria y secundaria, está, como se dice, encomendada  al Opus Dei.  Fui alumno del colegio, ahí fue donde muy joven me hice de la “obra de Dios”, y como suele pasar termine trabajando ahí.

Lo primero que me causa gran impresión, era la forma en que -en ese entonces- el nuevo director trataba a los padres de familia, en pocas palabras era un déspota; dicho director es supernumerario, después el sueldo de miseria que recibían los profesores, claro si eras del Opus Dei la cosa en cuanto al sueldo era distinta ¿Qué no se supone que ser del opus dei, no cambia  en nada tu cuestión profesional? Mucha gente de la labor de San Rafael me decía, “si esto es  el opus dei, no lo quiero”.

Lo siguiente que me impresionó, fue la forma de tratar a los mayores (en casa), eran peor que muebles, les inventaban cargos o puestos, para tenerlos ahí arrumbados.

Después, las pachanguitas (fiestas), que organizaban los súper en casa de uno de ellos, no porque las fiestas estén mal, sino por lo que se decía en esas fiestas. Una vez fui a una, recientemente de haber ingresado al colegio, y parecía el peor que un programa de espectáculos de la televisión. ¿No es que en "casa" no debe haber murmuración?

Y para colmo, parecía que la persona mejor preparada no tenia cabida en el colegio, ya que a los mejores, les inventaban cosas para poder despedirlos.

Ser agregado en ese colegio no era del todo bueno; la verdad,  entre agregados, todos nos llevábamos mal, también eran puras murmuraciones,  hablan mal de ti. Ante tus superiores. Era una porquería (perdón por la palabra).

Y así puedo seguir contando mas cosas, lo haré en oros escritos.

Pd. El colegio fue hecho para quedar bien con el entonces papa Juan pablo II en su visita a México en 1990.

Un saludo.

Franco21