Hoy he entrado en la web, y leído las últimas publicaciones. Me ha sorprendido positivamente la de María9400. Parece que hay muchas gente como ella, y no deja de sorprenderme. A ver si puedo contribuir en algo con mi experiencia a ayudar a las personas como María que necesitan cierta ayuda de fármacos para dormir.
En mi experiencia, el problema de dejar el Opus, si vamos a la raíz, se podría sintetizar así:
1.Somos en general buenas personas, que entramos en el Opus jóvenes, demasiado jóvenes, y con unos grandes ideales. Queríamos cambiar el mundo, y ganar el cielo, la eternidad, el Absoluto. Por esta juventud, y por nuestros ideales, pensamos que el problema somos nosotros, no ellos, no podemos ver que el problema es el sistema interno del Opus.
2. Asociamos la vida espiritual y la religión, con la Iglesia Católica y con el Opus Dei. Por eso, romper, o alejarnos del Opus, nos suponía internamente, a muchos, una tensión fortísima de alejarnos o cuestionarnos nuestra propia relación con la Iglesia y con Dios.
3. Es tremendamente difícil mantener esa relación con la Iglesia y romper con el Opus. Hay ex que consiguen hacerlo, otros que prefieren o concluyen en romper con la Iglesia, y otros que se mantienen en una distancia intermedia.
4.- Normalmente, todo este viaje intelectual, espiritual, lo hacemos solos. No lo podemos hablar con antiguos ex, ni con otras personas que nos puedan ayudar. El Opus ha sido nuestra única vida, ya que entramos jóvenes, demasiado jóvenes, la mayoría de nosotros.
5.- Esta tensión y esta soledad, llevan a un desgaste mental y sentimental muy fuerte.
Creo que hay muchas maneras de alegrarnos de haber tomado esa decisión tan difícil, y que personas como tú, María 9400, podáis dormir a pierna suelta: os cuento algunas:
1.- Ver, en webs como ésta, que son muchos las numerarias y numerarios que siguen dentro, y tienen que recurrir a pastillas para llevar esa vida tan desajustada entre los valores que predican y creen, y la realidad que les rodea.
2.- Si eres creyente en la Iglesia Católica, pensar que Dios es amor, y por tanto, estás en buenas manos, ya que la Iglesia te pone en relación con Dios, y te indica el camino.
2.- Si no eres creyente, pensar que has sido muy valiente para vivir de acuerdo con tus propios valores, ideas, en la soledad de la persona que decide o concluye que la luz en este mundo la tiene que poner uno mismo.
3.- Si eres agnóstico, o crees en un Dios que no es el Dios de los libros, ni el que inspiró el Corán, o el Talmud, o las cartas de Pablo de Tarso, pero eres una persona idealista, que quieres mejorar el mundo, también mereces felicitarte por ser así, quererte, y que te quieran.
Finalmente, y perdonadme tanta extensión, queramos o no, en este mundo para realizar grandes proyectos es necesario formar parte de algo más grande que uno mismo. A nivel político, el Estado, a nivel social, alguna organización. Sé que os sonará a utopía, pero estoy convencido de que los ex numerarios/as, deberíamos organizarnos de manera formal. ¿Os imagináis las cosas que seríamos capaces de hacer?. Imaginemos, por unos minutos, todo lo bueno que tuvimos, si lo emplearamos para un objetivo realmente posible, en cualquiera de los planos que os queráis plantear: personal, socio-político, económico, cultural... No soy jurista, pero tenemos que reconocer, que una de las cosas que JM Escriba hizo bien, fue la arquitectura jurídica y formal de su organización. Llamarle "de Dios", Dei, era algo que en la España subdesarrollada de los años 20 y 30 podía ser aceptable. Por si alguno no lo sabía, las SS hitlerianas, tenían como lema, "Gott mit uns" (Dios con nosotros), y en la entrada de Auswichtz estaba escrito "Arbeit macht frei", (El trabajo te hace libre). En fin, otro día más....
Aralar70s
