Que el 2011 sea el año de la Verdad... Que se acaben las falsedades y las difamaciones... Que a todos los miembros de la prelatura les ilumine el Espiritu Santo o al menos el sentido comun .... Que los que ya han conseguido marcharse vayan restañando sus heridas y recuperandose para incorporarse poco a poco a la realidad... Que la jerarquia de la Iglesia se deje de paños calientes y llame a las cosas por su nombre: Delito, manipulacion, opacidad, sectarismo...
Y a toda la buena gente que pasa por esta página... que la vida les devuelva todo lo que el opusdei les ha negado.
Un fuerte abrazo.
Mariki