Calandria:
No fui dura, ni te juzgo, no te conozco, he juzgado lo que escribes porque a eso nos arriesgamos cuando escribimos y lo hacemos público.
Ahora si soy dura, si de verdad eres numeraria, eres incoherente: “esta página web que no agrada a Dios porque va contra su Obra”, ¿qué haces aquí? Si en tanto valoras tu vocación ¿qué haces desagradando a Dios?, y por tus escritos se deduce que de tu “mal espíritu” ni tus directores se libran: "son quienes han tenido la misión de transmitirlo, lamentablemente quienes no lo han hecho bien. Llámense directores regionales, locales, de delegación, encargados de grupo etc.. Etc… etc; eres patética: “Por eso hago público mi agradecimiento a quienes pensando hacer un gran daño hicieron, sin proponérselo, un camino, marcaron una praxis sobre lo que NO debe hacer un miembro del Opus Dei si desea ser santo" ¡Como Dios!, más que Dios, ¡sabes lo que le gusta a Dios! ¡Sabes lo que pensamos!, ¿Quién hace un gran daño? Lo que no tiene que hacer un miembro del Opus Dei es juzgar, seréis juzgados y o una de dos o eres una impostora en tu vocación entrando aquí o una enviada directa de Dios o los directores en su lugar en cualquier caso sospechoso.
En segundo lugar no tengo ni idea de tus sufrimientos, cierto, solo sé lo que cuentas, aunque si yo lo tuviera tan claro como tú (tu vocación) sería más discreta o más honesta, no sé y por supuesto me tomaría unas vacaciones de OpusLibros, es mi opinión personal, lo que yo haría.
En tercer lugar, lo de nadar a dos aguas, ya es harina de otro costal, creo que soy campeona de natación. Te contaría mis campeonatos pero no me interesa, ni que leas mis escritos, no creo que te ayuden, he escrito aquí esperanzada en no acarrear más juicios ya me han juzgado bastante, no obstante nadie te obliga, igual que a mí.
Yo le llamo al pan, pan y al vino, vino y si no gusto, pues lo siento, y sí, he leído y releído a RobertLee, es digno de todos mis respetos pero lo vuelvo a sentir, yo soy de corte o cortijo, mientras estuve dentro 15 años, todos y cada uno de mis días fui honesta o lo intenté, no adapté el espíritu del opus a mi conciencia ni a mis criterios, lo viví hasta el último día, puro y duro y si dudo de si existe la vocación al opus, en realidad no tengo dudas, es porque un día una directora me aseguró que tenía una vocación como un piano y que escribir la carta era voluntad clarísima de Dios; 15 años después otra directora me aseguró que no tenía vocación y que escribir mi última carta, también era voluntad clarísima de Dios, he preferido quedarme con Dios ya que no entendí a los mensajeros, como no te entiendo a ti.
En cuanto a lo de esta página, te diré, la conozco unos tres meses, durante 30 años he cargado con una culpabilidad que no era mía, si lo he visto es porque no es posible que en tantos se hayan repetido las mismas situaciones, con tus palabras te digo que “una pesada carga para el Opus Dei.” (La de OpusLibros), no la han “parido” Agustina y otros, la ha “parido” el propio Opus Dei, y ahora no sabe qué hacer con el hijo no deseado, muy propio de él. De no haber sido por él, por las heridas que ha causado en nuestras almas, no estaríamos aquí.
Y por último te diré, no soy amiga de estas discusiones, no te molestes en contestar, yo no voy a hacerlo. Hoy he entendido una frase del Evangelio que nunca entendí: “Dejar que los muertos entierren a sus muertos”. Yo no era dura, ahora lo soy porque me han hecho y solo cuando pretenden jugar conmigo y porque no entiendo tu juego, similar a otros que he leído, ¿Os turnáis? o ¿Sois el mism@ con distintos nombres? ¿Calandria?, ¿Morgana?, ¿Morgana?, ¿Calandria?, porque tenéis hasta los mismos errores lógico/gramaticales y no hablo de la lengua Castellana. Te veo desnortada, solo puedo entender tu trayectoria si eres una persona mayor y desesperanzada o estás enferma, si es este el caso, te pido perdón. También he leído a gente honesta que está dentro y merecen todo mi respeto.
Si alguna vez, Dios no lo quiera, necesitaras de verdad ayuda, muchos de aquí estarán dispuestos a ayudarte.
Janabenito
P.D.
No sé si eres española, por aquí hay un anuncio, el del primo de Zumosol, un muchacho alto de unos dos metros, que cuando su primo de unos 4 años se “acongoja” les advierte a los demás, ¡Cuidado mi primo es el de Zumosol! y es amigo mío. ¿Infantil no?
