Varios temas.- EsperanzaRO
Fecha Wednesday, 24 November 2010
Tema 010. Testimonios


Gracias Amelia y Atlas por compartir sus historias, a la vez que son únicas, los demás reconocemos en ellas aspectos muy semejantes a lo que nos tocó vivir a cada uno dentro, a veces es imposible ponerte en los zapatos del otro si uno mismo no lo ha vivido y aun así variará con las cualidades de cada uno, no se puede usar una misma medida en todos y esa creo que es parte de la falta de caridad que sufrimos los que ahora estamos fuera, ya en algún escrito salió lo diferente que es el umbral de dolor en cada persona y en el opus se pretende usar un mismo costal para todos. En teoría se nos decía "que cada persona es única e irrepetible" pero luego en la práctica se olvidan de eso, es más se olvida QUE SOMOS PERSONAS y como se ve en vuestros testimonios en el opus se da de baja cuando ya pueden UTILIZARTE.

 

A mí también me dejaban abandonada (yo tenía además una dolencia que limitaba mi movimiento), en mi habitación aun sin comer, la única que se acordaba de traerme algo era una auxiliar y otras veces, tenía que salir a gritar al pasillo a ver si alguien me escuchaba para poder pedirle algo de comer. No sé donde quedaba todo aquello que los "enfermos son un tesoro" me sentía un estorbo.

 

Gracias Sarnoso por tus anécdotas. En mi país el opus es ultra conservador. Esos paseíllos en grupetes sólo estaba permitido a las mayores y bajo gran sigilo recuerdo que casi todas ellas eran directoras de centros... ¡Ah! y de las idas a la playa, gran diferencia. Todas en un bus y por supuesto en el trayecto, no podía sonar música rock ni nada parecido pues las mayores ponían el grito en el cielo. Además nos contaban que nosotros teníamos mucha suerte de poder ir todavía a la playa, pues había otros países en los que no se podía ir y repetidamente nos ponían de ejemplo Argentina. Ya nos contaran los argentinos...

 

¡Uy! y de los bañadores, ni qué decir, el mío cumplió su ciclo y heredé a una mayor que quería deshacerse del suyo y se compró uno lindo. El modelito incluía faldita casi hasta la rodilla, siempre he sido un persona discreta en este aspecto ¡pero ya era el colmo!, además de quedarme grande, cuando me metía al agua pesaba tanto que no me dejaba moverme. Le comenté a alguna del consejo local del curso anual que mi bañador era horrible; más tarde cuando regresé de bañarme, de pronto todas elogiaban mi atuendo. No soy tan ingenua, les habían dado la consigna que alabaran mi traje de baño. Todas se prestaron a mentirme, "porque convenía". El modelito me acompaño varios años. J

 

Saludos.

EsperanzaRO









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