Acabo de hacerme con el libro de Ramón Rosal, no sin grandes dificultades por cierto. En la librería más importante de mi ciudad, -que lo es mucho-, ¡¡no lo tenían!!, me lo tuvieron que pedir a la editorial, cosa insólita porque siempre tienen de todo y de todos... ¿será que la dueña es amiga de numeraria periodista?  me queda esa duda. Después de unos días me llamaron que ya lo tenían. Sin más. Me pregunto, ¿esta librería no tiene siempre todo y de cualquier línea? se ve que este libro no. Por algo será, ¿serán amigos del Corte Inglés?

Segundo y más importante, me ha dado tiempo a leer prólogo, índice y algunos de los capítulos y sólo animaros a todos a comprarlo, se aventura muy muy interesante a la vez que una muy buena y  posible ayuda para muchos de nosotros, dada la "envergadura teológica, antropológica, humanista y psicológica del autor". Ramón lo poco que he leído me parece apasionante. Creí que la primera parte me iba a interesar más y he descubierto que la segunda no tiene desperdicio..... prometo una pronta lectura, y desde luego quiero ir a Madrid cuando lo presentes. Espero sea factible por las fechas.

Otro tema para terminar.

Parece que algo se mueve en cuanto a las cotizaciones a la Seguridad Social. La cosa está en marcha, ya tenemos algunos Inspectores de trabajo interesados en el tema y en este pais cuando alguien se interesa por un tema... hay que echarse a temblar... porque va en serio.

Si el hecho de que ahora se estén dando de alta en la Seguridad Social a sacerdotes, numerarias administradoras, oficiales de delegaciones, gentes en trabajos internos que antes no estaban aseguradas,... esto nos favorece ya que quiere decir que reconocen que ANTES LO ESTABAN HACIENDO MAL, así de claro  y contundente. Porque los trabajos son los mismos y se supone que siguen haciendo de madres, de tías, de abuelas por lo que según ellos, estas personas por ser de la "familia" no tienen derecho a esto, ya que en las familias "normales" no hay contratos, sueldos, etc..... Pero que desfachatez: Trabajos de sol a sombra, sin domingos, sin fiestas, sin vacaciones, sin descansos, sin contratos, sin sueldos (te daban de comer a cambio y te vestían mas bien mal, por cierto)... y que digan que lo hiciste voluntariamente... manda c...!!!!

Animaros los que estéis en esta situación, los inspectores están ávidos de saber que pasa y de regularizar situaciones anómales, como las que ya solucionaron en los años 80-90 con las numerarias auxiliares de las que todavía se acuerdan. Consiguieron con su buen hacer, que aquello no fuera una "familia" como pretendían, y las numerarias auxiliares, todas a una a COTIZAR!!!! como Dios manda, porque este país lo sostenemos entre todos. No vale no cotizar y si cobrar pensiones de orfandad, subsidios, tener asistencia santiaria, salario social,  etc. etc..... Y menos en estos tiempos de crisis, que están los organismos como para no perseguir este tipo de delitos......

¡Los inspectores nos están esperando en sus despachos!

 Si esto pasó con las numerarias auxiliares, ¿porqué no con las administradoras, con los oficiales de delegaciones, con los sacerdotes? que no nos engañen con el tiempo transcurrido, porque ante la trampa no hay tiempo que valga. El estado tiene sus recursos y los sacará a la luz

Hasta pronto y mucho ánimo que esto marcha.

Patalibre.