Opuslibros - Trágicas relaciones con la verdadera familia.- Antonieta

Trágicas relaciones con la verdadera familia

El escrito de Nacho me ha traido a la memoria las trágicas relaciones que tuve con mi familia (mi verdadera familia: la de sangre). Como les conté en mi primer Testimonio, mi mudada al centro fue una tragedia en la familia, mi madre lloraba como si me hubiera muerto y mi padre con una cara que nunca mas lo volví a ver así!!! Pero mi recuerdo va a las visitas a mi familia, las enfermedades, las celebraciones familiares, los eventos importantes...

Cada vez que yo tenía algo con mi familia surgían las mil excusas... Claro, clarísimo, hoy lo veo clarísimo. Como TODA mi familia estaba en contra de mi ingreso en el opus, no era conveniente enfrentarme a ellos durante esos primeros años de mi permanencia allí.

Las razones que me daban, siempre las mismas, era que una madre de familia no tenía tiempo para compartir con sus padres una vez que se casaba y tenía hijos. Yo sin entender mucho aquello pues tenía tiempo de sobra para poder compartir esos momentos con mi familia, y mis hermanas casadas siempre compartían todo, yo no iba.

Yo fui de las que siempre obedecieron y quería vivir aquello tal cual me lo iban "explicando" (imponiendo)... Como en toda familia hay muchas cosas que envuelven el ambiente familiar... en mi caso tenía una hermana que se casaba con un divorciado: OH PECATO!!!

Aquello fue una verdadera tragedia asistir a aquella ceremonia que me costó lágrimas de sangre convercerlas de la necesidad e importancia de estar yo allí. Siempre les decía que en la medida que me alejara más de mi familia se pondrían más en contra de la obra, pues les estaría dando la razón a sus argumentos que decían que el opus aleja y separa los hijos de la familia. Ellas me decían que ahorita era mas importante cuidar mi "vocación" pues era una llamita pequeña que se podía apagar... que ya podría estar con ellos y enfrentarme a ellos una vez tuviera mas fuerza... En medio de tantos años esto siempre fue una lucha. Tuve varios casos en los que terminaba en llanto para que me entendieran, no había forma que aquello lo vieran natural y que yo insistía en que si yo estaba en medio del mundo ¿porque tantas privaciones?, ¿tantas restricciones? "Son exigencias de la vocación"!! QUE VOCACIÖN Y QUE C...!!! Tratamientos de lavado de cerebro, tácticas de presión... Poner a DIOS en semejantes aprietos y justificaciones!!!!

Bueno, mi recuerdo viene en Septiembre de 1986 Estaba yo de visita en Caracas, no recuerdo haciendo qué, pero por supuesto llegué al centro más alejado del centro de la ciudad, a Altoclaro, mi padre cumplía años (ya el venía con ciertos tratamientos médicos pues no estaba muy bien de salud). Cuadrando mi día para poder bajar a la casa de mis padres y estar en su cumpleaños aunque fuera por un rato, NO ME DEJARON IR!!! ......

En noviembre me dicen que hay que operar a mi padre pues tiene una úlcera gástrica peligrosa que le estaba ya sangrando. Mi padre era una chimenea de tanto que fumaba y mi cuñado, que es médico, nos había dicho que era una operación de alto riesgo pero que había que someterlo a ella ya. Yo, que desde que salí del Centro de Estudios me mandaron a la ciudad mas lejana de Caracas (Maracaibo) para mantenerme alejada de mi familia, quería estar presente en esos momentos!! Bueno, lo cierto es que me dijeron que no! ni hablar... Gracias a Dios pude cuadrar una reunión en Caracas por razones de trabajo para esos días y asisitir así al momento en que mi padre sería intervenido. Mi padre llegó un jueves en la tarde a la clínica, lo operaron el viernes en la mañana y murió el sábado en la mañana. Gracias a Dios pude estar allí presente en todo momento... Hoy todavía añoro haber podido compartir tambien su último cumpleaños que, sin razón justificada alguna, no estuve.

Amigos, a lo que quiero llegar es a ilustrar una vez mas el proceso al que someten a las personas en relación a su familia de sangre. Sí es verdad que los separan porque quieren que les diga algo: Hoy casada, con dos niños pequeños visito a mi madre y nos reunimos mis hermanas por lo menos dos veces a la semana, hablamos por teléfono diariamente y lo que nunca creo que superaré es la falta física de mi padre... Si me hubiera visto y disfrutado fuera de la obra, como hubiera él disfrutado mis dos hijos. Papi, desde allá arriba sé que me bendices y que estás felíz de verme hoy MUY feliz.

No quiero dejar de recordar que cuando me fui de la obra, mis hermanas todas casadas, la casa de mis padres estaba remodelada para mi madre y mi cuarto estaba allí, intacto, mi padre siempre dijo que no tocaran mi habitación por si algún día yo volvía. GRACIAS papi porque allí estuve hasta que me casé