No se dan cuenta los directores. 1.¿Por qué se muere el Opus Dei?.- Pensando
Fecha Friday, 02 October 2009
Tema 010. Testimonios


Un tiempo fue un tipo cuyo nick no recuerdo, otra época fue Morgana, ahora parece que es Calandria. Vaya apariciones. Calandria: vale la pena atender lo dicho por  savonarola.
 

La Obra es dañina, patógena y engañosa. Su Sma. Trinidad son: la imagen, el poder y el dinero.  No es íntegra pero tampoco es la maldición total, porque tal cosa no existe, pero sí es una institución falsa, sectaria -por egoista- y soberbia.  Cegada para ver sus fallos: así se da el "hara kiri". Ella solita se envenena de sí misma, y se mata. Lo dijo el fundador: cuando viváis como indiferentes, habréis matado el Opus Dei. Es uno de los testimonios más repetidos de esta web. Tengo aprox 500 citas que compartiría con cualquier autoridad de tu prelatura. Tu institución se muere porque se mata a sí misma. Quiere 500 para sobrevivir, y maltrata a los miles que ya tiene. No tenemos ni una sola instancia jurídica  para apelar derechos sin mediación de los controladores directores; y de la Vicaría judicial ni dicen quién la ostenta o detenta, ni cómo acudir sin mediación de directores, ni una porra ni una nada. Vale pura nada.

No hay una sola representación para hacer oir una voz o una petición: todo está reservado a las graciosas concesiones que tengan a bien otorgar los frecuentemente incultos y casi siempre rígidos directores. A las Semanas de trabajo, reuniones donde se supone que se decide el rumbo de las demarcaciones, y se envían solicitudes o sugerencias, no acuden personas elegidas por los miembros no directores del Opus Dei, sino los designados por los directores. Ellos trabajan consigo mismos, se hablan a sí mismos, se oyen a sí mismos, se apoyan a sí mismos, se esconden a sí mismos... no se dan cuenta (por eso ha de decir Jacinto que son inocentes: vaya inocencia, la del terco que no quiere ver), de que con su sobrenaturalidad degenerada, matan vocaciones, perseverancias, amor, y quizá la continuidad de su idolatrada institución. Sí: idolatrada. Sólo Dios es "incriticable", y las instituciones no son Dios: ni siquiera la Iglesia.

Por eso quizá, la Iglesia espere a que la Obra, solita, siga desmoronándose. Piensan quizá los jerarcas: "ya caerá" Hoy una hoja, mañana una rama, después un tronco, luego otra rama, y así... Algo similar dice supo. Hay cosas más urgentes para la autoridad eclesiástica. Y más suaves, y más buenas a las cuales dedicarse, y con mejores resultados. Y más cristiano es hacer, que devastar y satanizar. Y sin embargo, me ofrezco, como otros, a hacerme presente a la autoridad eclesiástica que quieran, para testificar. Ojalá que pudiese ser mientras aún soy "de la labor de san Miguel" que ayer "festejamos en familia"...

Saludos a los directores que nos leen. Ut videant !  Estamos hartos de muchos de ustedes,  y no tenemos quién nos haga caso. Nos oyen pero no nos escuchan; nos ven pero no nos miran; nos quieren pero no de corazón...
 
Pensando







Este artículo proviene de Opuslibros
http://www.opuslibros.org/nuevaweb

La dirección de esta noticia es:
http://www.opuslibros.org/nuevaweb/modules.php?name=News&file=article&sid=15209