Otros Cristos. Para Calandria.- aldeano
Fecha Wednesday, 30 September 2009
Tema 125. Iglesia y Opus Dei


Querida Calandria,

Lo que te digo es una conclusión de este pasaje: Venid a mí todos los que estáis fatigados y sobrecargados, y yo os daré descanso. Tomad sobre vosotros mi yugo, y aprended de mí, que soy manso y humilde de corazón; y hallaréis descanso para vuestras almas. Porque mi yugo es suave y mi carga ligera (Mt 11, 28-30).

En el Opus Dei, como tú misma dices, se trata de imitar a Jesús en todo, al punto de que al "ser otro Cristo", negarse a uno mismo de tal manera que la personalidad propia se anula y uno pasa a ser un autómata... Y como los directores, es decir, la estructura, tiene "gracia de estado", quienes conducen de facto en qué consiste "ser otro Cristo" está dictado por la estructura. Y el Opus Dei, y no me lo vas a negar, exige una dedicación total a través de sí mismo.

Por supuesto que si uno se dice cristiano, uno pretende seguir e imitar a Cristo, pero hay que tener claro que uno no es Cristo y nunca podrá serlo ni siquiera siendo "otro Cristo" por la sencilla razón de que somos pecadores. Y el mismo Jesús en ese pasaje que te cito lo viene a decir: La carga que nos impone él es llevadera... Es que si no, no tendríamos forma de salvarnos.

Entonces, cuando uno ve el nivel de angustia que llevan los miembros del Opus Dei, uno se pregunta si realmente Dios quiere eso para sus hijos. Me niego a creerlo porque Dios es un Padre misericordioso... Sinceramente, todo aquello que agobia el alma y no la permite crecer, no puede venir de Dios y la exigencia de ser totalmente como Dios mismo sólo puede ser agobiante mirada desde nuestra naturaleza.

No, ser "otros Cristos" es, al menos así me lo dicta mi intuición teológica y filosófica, tomar como punto de referencia a Jesús, pero siempre con la certeza de que no podemos ser cómo él, omnipotente... Podemos y debemos ayudarlo, porque es nuestro hermano y amigo y así como Él nos ayuda, pero Él sabe de nuestras flaquezas. Y nosotros debemos ser humildes y reconocerlas también para así conocer cuáles son y mejorarlas en la medida de lo posible... pero de lo posible.

Recuerda que el Mandamiento del Amor dice: Amarás al Señor tu Dios, con todo tu corazón, con toda tu alma y con toda tu mente [...] Amarás a tu prójimo como a ti mismo (Mt 22, 37.39). Tú te quedas sólo con lo primero, pero olvidas el "como a ti mismo"... Dios quiere que nos amemos a nosotros mismos por ser sus hijos y por ser imagen suya. Si no nos cuidamos, despreciamos lo que somos y sólo miramos a lo que no somos ni podremos ser nunca, estamos despreciando parte de su Creación. No digo que ahora haya que ser egoístas y pensar que somos fenomenales; no, pero Dios no nos hace distintos por capricho para hacernos más difícil el camino a ser "otro Cristo".

No. Así como hay diversos carismas y el Espíritu sopla de donde quiere, Dios actúa a través de nosotros confiando y dándonos una oportunidad para que explotemos nuestros talentos con la Voluntad de Cristo mediada a través de la nuestra. No, esto no es nada herético... Si no hubiera mediación, ningún acto bueno que hiciéramos sería libre.

Piensa bien lo que te digo; puedes estar de acuerdo o no, pero no me vas a negar que tiene fundamento. Sé que tengo una forma de argumentar muy emocional y muy pietista que entra en total disonancia con la argumentación del Opus, pero no por eso voy a tener menor conocimiento del cristianismo... Ni siquiera me conoces y yo no te conozco... aun cuando si estuvieras ahora en la U. de Navarra y nos pudiéramos hasta llegar a cruzar sin saberlo; por eso, porque la formación religiosa propia es propia (¡y tan ligada a las experiencias vitales!), mejor ahorrémonos las referencias personales, que no vienen al caso.

Un abrazo,
aldeano







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