Querida Books,
yo he pensado muchas veces escribirte para agradecerte del fondo del alma tu frase mi vida sin mí, pero estúpidamente nunca lo hice, no sé por qué: creo que porque es una manera de decir perfecta, y eso intimida un poco, no sé por qué también.
Pero el viernes, leyendo la segunda carta de tu padre, y todo lo que escribes sobre ella, pensé que me gustaría decirte que esa frase es muchas veces un enorme consuelo, de muchas maneras, y que me hace mucha compañía, porque entiendo perfectamente lo que quieres decir con ella.
Besos,
Carocha