Castalio, yo escribo poco en esta página, pero la leo regularmente, quiero decirte que he leído tu historia "Por qué y cómo me salí del Opus Dei" con mucha atención y deseo felicitarte de todo corazón. Has tomado la mejor decisión, ¿qué importa si lo has hecho siendo “mayor”? nunca es tarde para ser feliz, pero realmente feliz, con la felicidad que sólo experimentan los seres libres de verdad, libres de la mentira, de las hipocresías, de reglas y normas que en lugar de atraer terminan alejando de una auténtica espiritualidad cristiana.
Te deseo el mejor camino, que disfrutes del sol en tu rostro y que cuando mires al cielo sientas profundamente el sabor de la libertad.
Costanza