Queridos todos,
la verdad no sé por qué escribo esto, pero simplemente me salió del alma.
Dios sabe mucho mejor, incluso que nosotros mismos, cuánto sufrimos en nuestras almas. Aunque muchos de ustedes hayan sido engañados en Su Nombre, entregado años o meses o quizás sólo días para un engaño, Él no olvidará el esfuerzo y la generosidad de quienes, con toda la mejor voluntad, entraron en el Opus Dei pensando que sí, eso quería Él de cada uno.
¡Ánimos a los que se sientan abandonados! Dios no abandona, nunca. Y lo digo por experiencia :)
aldeano