Las respuestas a todas mis preguntas fueron constestadas hace unos meses cuando me reencontré con el zombi, aquí en esta página. Bueno, lo cierto es que ella me encontró a mí hace unos meses. Desde entonces, fueron muchas nuestras conversaciones teléfonicas  y poco a poco me fui dando cuenta de que me había encontrado con otra persona que nada tenía que ver con aquella que dejó Sevilla hace diez años. Mi idea sobre ella se iba transformando a la vez, poco a poco cuando fui leyendo su historia aquí.

Ahora, después de haber estado con ella en Sevilla muchos días, no sé cómo explicarlo. Nos dimos un abrazo al vernos que parecía no tener fin. Después me quedé mirándola. Reía, hablaba sin parar, yo diría que daba saltos. Y yo seguía mirándola callada, porque no me lo podía creer.

Por primera vez le veía los ojos. Por primera vez la veía reir. Es una mujer (que no media) llena de vida, de energía, feliz.

Y es que ha soltado todo lo que llevaba dentro. Fue muy valiente. Decidió coger el toro por los cuernos. Se puso el mundo por montera. Hizo una gran faena, y si yo fuera  presidenta le daría las dos orejas, el rabo y los morros. Con miedos, con dudas, con inseguridad. Pero creyó en sí misma y lo consiguió.

Qué ratos tan buenos hemos pasado recorriendo Sevilla, por todos esos barrios que ella añoraba, por el parque, en la feria, en coche de caballos. Qué buenos ratos en mi casa, con amigos, con mi familia, riendo, charlando, recordando... suspirando como dos viejas.

Soy bastante excéptica, pero puesta  a creer, la historia de maripaz me parece un milagro, que evidentemente no se puede atribuir a sanjosemaría.

No sé si se trata de un caso único, ojalá existan más que yo desconozco.

Me decicí a escribir "ojalá la obra desaparezca" después de pensar en todas esas personas que siguen sufriendo. No sólo pensaba  en las que se fueron. Dentro, hay mucha gente que lo pasa mal. Yo conocí a gente muy buena allí. Personas generosas, cariñosas, siempre dispuestas. Siempre dispuestas a disculpar. Estas personas lo pasan mal también cuando ven las cosas que se hacen mal, pero tienen mucha fe en su vocación. De todos modos yo pienso que están metidas en una especie de burbuja  y que debido a su bondad no pueden creer que la obra sea tan mala, porque además, ellas son parte de la obra y son gente buena. Pero fue Dios quien las hizo así, no la obra.

Hay otra gente no tan buena, pero que también lo pasa mal porque se siente impotente. Y por muchos más motivos.

Me acordaba también de las que nacieron directoras. Sí, porque en la obra hay quien nace con vocación de director y durante sus años en la obra lo único que han hecho ha sido mandar. No saben hacer otra cosa. Y si alguna de estas personas se va, también lo pasa mal, entre otras cosas porque cuando salen no tienen a quien dirigir y era lo único que sabían hacer. De éstas se van menos. Las que se marchan, hechas directoras, que no nacidas, también lo pasan mal y lo pasaron mal.

Pero mi historia de hoy es una historia feliz. Porque ahora maripaz es amiga mía y de los míos. Porque pachi desapareció para siempre. Me alegro de que aquel zombi volviera al mundo de los vivos. Me alegro de que maripaz sea hoy una mujer ilusionada, generosa, luchadora, feliz, que ama la libertad y la disfruta.

Un abrazo. Un besazo, maripaz.

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