Mi querida Aquilina,

Como bien sabes estuve 22 años trabajando en un colegio de chicas cuya dirección espiritual estaba encomendada al Opus Dei y si te sirve de algo mi experiencia y testimonio ahí va lo que yo deduje del por qué la separación de sexos.

Es cierto que está científicamente probado que el cerebro del hombre y la mujer evolucionan de distinta manera, es ciero que las chicas maduran antes que los chicos, hasta ahí de acuerdo. Pero ¿os podeis imaginar un colegio con 1.200 alumnas, 100 profesoras y sólo como hombres los tres sacerdotes, el jardinero,el cocinero, su pinche y el portero? me da un "paralis" el sólo pensarlo!!!. Fijaros bien, eso era lo más extraterrestre que os podais imaginar. La verdad era que con niñas es mas fácil trabajar, temas de displina y demás no había demasiados, no había problemas en la vigilancia de los descansos, ni baños diferenciados. Como bien sabeis las niñas son muy romanticonas y los chicos muy brutotes. No conocían nada, por eso era fácil tener vocaciones con 14 años y medio.

En los colegios de chicos, los conozco bien por mis hijos, primaba la violencia porque eso era hacerse hombre. A mi hijo estando en 6º de primaria le pusieron la película "La jungla de cristal, me quejé y la respuesta fue: "Mejor que se peguen en el colegio que no en casa". ¡¡No me extraña que haya ahora violencia de género!!

Lo que apuntais tambien es cierto, es imposible que haya profesores y profesoras, menudo tinglado se montaría, se acababan los numes y las numes, los agregados y las agregadas, pues el roce hubiera engendrado cariño, ¡¡qué escándalo!!.

Sólo quisiera aportar mi experiencia de esos 22 años, es un mundo irreal, se escudan en que son colegios laicos cuya dirección espiritual está encomendada al Opus Dei por voluntad de los padres fundadores de dichos colegios, ya que vieron que era lo mejor para sus hijos. Yo añadiría que:

1.- Es el modo de tener vocaciones al Opus Dei, actualmente no hay otro.

2.- Para muchos padres supernumerarios la mayor honra es que su hijo/a sea numerario/a es la corona que tendrán en el cielo, si lo abandonan es una desgracia (he sido muchas veces paño de lágrimas de alumnas maltratadas por sus madres supernumerarias al dejar la Obra).

3.- Se presume del número de hijos con el que el Señor bendice al matrimonio, si son mas de 5 es una bendición, tres es un egoismo...

4.- La profesoras son en su mayoria de la Obra, las que no pertenecíamos a la organización carecíamos de rectitud de intención y no podíamos aspirar a ningún puesto de relevancia dado que no conocíamos el espíritu de la Obra. Se valoraba la pertenencia a la Obra y en ningún caso la experiencia o valía personal = discriminación absoluta. Las que no éramos de la Obra teníamos 24 horas de clase, las de la Obra menos porque eran las tutoras, directivas y demás artilugios.

Podría seguir enumerando cantidad de injusticias, presiones y demás. Decir sólo que todo estaba envuelto en un papel edulcorado con el Amor a Dios y al Padre y que sólo perseguían la santidad y la unidad.

Dixit, Marietta