Quería dar mi opinión sobre lo que escribió finde el 26 de enero.
Hablas sobre la auxiliar Ana Mª, sobre si lo escribió ella o nó, sobre el comentario que le dijo su padre, sobre lo ridículo que resulta el opus inventando esas tonterías, y de lo que inventan los de la oficina de información o de apostolados como tu la llamas, vale me parece muy bien cada un@ escribe sobre lo que quiera, pero te digo que en esto que escribistes no lo comparto, tu misma dices que aunque algunos se escandalicen:
"Las auxiliares, por el hecho de serlo, parece que deberían ser el dechado de virtudes dentro de la obra (y no me refiero a ésta en concreto, insisto). He tenido experiencia y las nax, por la formación infantil que reciben, han sido y son para muchas numerarias administradoras, “su corona de espinas”...
El fundador decía aquello de “mis hijas pequeñas” y no le faltaba razón puesto que así las trataba, además de ponerles el pie en la cabeza para que no intentaran levantarla para ser algo más que sirvientas/criadas/auxiliares. Las educó y las educan para que no crezcan y dependan siempre de las numerarias, lo que les lleva a ser, muchas veces, crueles, mimadas y caprichosas. Cuando se van de la obra es cuando se vuelven personas normales, como el resto de los que nos hemos ido. Mientras están, no tienen desperdicio en cómo amargar la vida a las numerarias de las que dependen. No dudo de que serán muy santas pero igual o más son las que las tiene que dirigir, convivir y soportar".
Pues bien, ni me duele, ni me escandaliza, ni me considero dechado de nada, pero es una generalización bastante exagerada y absurda.
Yo fuí 22 años nax, y no sé quién ha sido para quién “su corona de espinas”. Es cierto que ellas mandaban, ya sean las numerarias o en su caso las administradoras, y obedecer, obedecer, obedecer, en silencio y a veces con rábia o con mucha rábia, pero PISÁNDOME YÓ, y nunca pretendí ser mas de lo que era, lo que sigo siendo ahora, y si antes era feliz, ahora lo soy más, muchísimo más.
Pero las que nos hacían la vida imposible en más de una ocasión eran las administradoras, y ¿sabes cómo les llamábamos? "Las bién pagás", que a veces estaban tan poquito en las administracciones pequeñas que había que pedirles la foto para reconocerlas, y eso sí a recoger el sobre bien puntual. ¿Y el trabajo que les correspondía realizar por justicia?...cobraban un sueldo... Enfín llamativo!!.
Cuando se van de la obra es cuando se vuelven personas normales, creo que te has pasao tres pueblos, ¿acaso somos bichos raros para volvernos cuando nos vamos personas normales? Siempre me sentí una persona normal, igual que las que se han ido yá, como las que aún están dentro, allá cada cual, ante todo son y somos personas y los calificativos que has empleado, te dejan a tí en un lugar que dejas mucho que desear.
¿Porqué tienen que ser crueles, mimadas y caprichosas por lo que dices tú que dependen de las numerarias? Me dá que fuistes una de ellas, y si tienes esa experiencia, algo harías para que las que tú dices se comportaran así.
Me parece que te as quedado un poco atrasada, no te discuto que al principio de mi experiencia fuera así, dependiamos totalmente de las numerarias, por que ellas no se alejaban de nosotras controlandonos, pero ahora ya se han separado y mucho. Y aunque sigan consultando todo o casi todo, algo mas a su aire van, te lo puedo asegurar, algunas hasta se pasan y hacen muy bien.
Un saludo
Maries
