Ante todo felicitarte y congratularme por tu trabajosa tarea de proporcionarnos el elenco  de los primeros miembros del Opus Dei con fecha de pitaje y algunas observaciones  en tu artículo Resultado de mi estudio. Comprendo que te haya agotado la tarea. Pero realmente ha valido la pena. Además,  es un tipo de trabajo sobre el que se pueden construir muchos otros. Para hacerlo es indispensable esa base que tan generosamente nos proporcionas.

Lo que más me ha llamado la atención es que aparecen pitajes de sacerdotes diocesanos en fechas anteriores a la fundación de la Saciedad Sacerdotal de la Santa Cruz...

El más emblemático es el de José María Somoano Berdasco, que pita el 2 de enero de 1932 y fallece ese mismo año en 16 de julio. ¿Sería él consciente de haber pitado?  ¿De qué se hizo miembro? No de un instituto secular, ni de una sociedad de vida en común sin votos públicos; ni siquiera de una pía unión. ¿Qué es pitar en ese contexto?

En el artículo 3 del Reglamento del Opus Dei de 14-II-1941 se lee: “Bajo ningún pretexto serán admitidos como socios del Opus Dei ni los sacerdotes seculares, ni los religiosos ni las religiosas”.

Siempre he oído decir —incluso al propio fundador— que hubo un momento en la historia de la Obra en que estuvo a punto de dejar abandonado  a su propio impulso el Opus Dei para dedicarse a una nueva fundación dedicada a los sacerdotes diocesanos. Posteriormente se dio cuenta de que esos sacerdotes diocesanos podían tener cabida dentro del Opus Dei sin necesidad de una nueva fundación. Y me planteo: ¿es que había sacerdotes agregados, antes de que hubiese la posibilidad de ser sacerdote agregado? ¿Qué clase de miembro era José María Somoano Berdasco?  ¿Era agregado? Pues si era agregado, el primer agregado de la Obra —o supernumerario interno u oblato o como quiera llamársele— no fue un laico que recibió una cruz de palo por ese motivo, sino un sacerdote diocesano. Por otra parte en el reglamento de 1941 se lee en el artículo primero que en “el Opus Dei hay tres cases de socios: inscritos, supernumerarios y numerarios”. ¿Qué sería José María Somoano Berdasco? ¿Acaso supernumerario? ¿Como insertar el pitaje de José María Somoano Berdasco en este contexto?

El fundador hablaba de una serie de sacerdotes seculares que habían sido su corona de espinas. Le oí decir que en el momento mismo en que creó unos compromisos para ellos en virtud de los cuales le deberían obediencia, lealtad, etc.; en ese mismo momento comenzaron a desobedecerle y a portarse mal. Como José María Somoano Berdasco murió tan joven, probablemente no le dio tiempo a portarse mal. ¿En qué consistía pitar por aquel entonces? ¿A qué se comprometían?

Con la figura de instituto secular había unos votos temporales y posteriormente, al cabo de cinco años, unos votos perpetuos. Fueron calificados como votos sociales, para distinguirlos de los votos de los religiosos. Fueron los que a mí me tocó hacer. Yo hice unos sociales. Con la figura de prelatura personal esos votos se sustituyeron por unos contratos —me parece que los llaman así— primero temporales y al cabo de cinco años perpetuos. Por los años cuarenta y anteriores, lo que habría —no lo sé, sino que lo conjeturo— serían unos votos, promesas, juramentos u otra clase de obligaciones de conciencia de sujeción personal  a José María Escrivá. Le oí decir a Josemaría Escrivá que había algunos sacerdotes que obligaban a sus dirigidos a hacerles voto de obediencia, para a continuación descalificar enérgicamente esa praxis. Quizá también él la practicó por aquello de ceder, sin conceder para recuperar. De algún modo tenía que comprometer a la gente. Tampoco le gustaban los votos, pero nos hacía emitirlos. A esos sacerdotes que lo coronaron de espinas es claro que les hacía asumir ciertas obligaciones de conciencia. No creo que fueran temporales. Y lo mismo debería de pasar con los inscritos, numerarios y supernumerarios. No creo que hayan tenido incorporaciones primero temporales y luego perpetuas.

De nuevo mi admiración por tu aportación tan valiosa y documentada.

Gervasio